La reina Sofía está atravesando uno de los momentos más difíciles de su vida
La reina Sofía ve como su hermana se va apagando

La reina Sofía vuelve a enfrentarse a un golpe durísimo en su vida personal, esta vez por Irene de Grecia. La hermana pequeña de la emérita está cada vez peor por culpa del Alzhéimer, que avanza a pasos tan rápidos que Irene apenas reconoce a ciertas personas de su entorno.
Irene, conocida en la familia como la tía Pecu, siempre ha sido el gran apoyo de la reina Sofía. Una presencia constante, un refugio emocional en los momentos más duros, especialmente cuando Juan Carlos se encargaba de humillarla con sus desplantes e infidelidades. Irene era quien sujetaba a Sofía cuando todo se desmoronaba. Cuando salía a la luz algo nuevo sobre Juan Carlos I, ella siempre estaba ahí. Sin embargo, esa compañía va a acabar desapareciendo por culpa del Alzhéimer.
Ahora, el papel se ha invertido y es la reina emérita quien acompaña a su hermana en este tramo final. Y lo está haciendo destrozada, porque Sofía está viendo cómo Irene se apaga poco a poco, incapaz de frenar el deterioro imparable de la enfermedad.
Una soledad difícil de digerir
Ver cómo Irene pierde cada día un trozo más de su memoria y de sí misma está siendo un golpe emocional durísimo para Sofía. Sabe que, sin su hermana, se quedará sin su mayor confidente, sin la única persona que ha estado siempre a su lado sin condiciones ni reproches.
Con Irene apagándose y Juan Carlos desaparecido en Abu Dabi, la reina Sofía se enfrenta a un futuro cada vez más solitario, aprendiendo a gestionar los problemas que sigan llegando sin el apoyo de la persona que más la ha cuidado durante toda su vida. Además, las relaciones internas tampoco ayudan en nada a la emérita, que vive constantemente preocupada por el hecho de que sus hijos no se llevan bien y por la soledad que la ha acabado invadiendo al perder la compañía de sus hijos y de sus nietos.
La batalla contra el Alzhéimer es una de las más crueles que existen. Y esta vez, está siendo especialmente devastadora para la reina emérita, que ve cómo su hermana, su roca, su refugio, está perdiendo la batalla día tras día.