Leonor empieza a tener problemas graves por la bebida

Leonor ha llegado a una edad en la que lo único que quiere es ser libre y disfrutar de la vida como nunca antes había podido hacer. El hecho de abandonar la vida en Zarzuela para probar lo que se siente viviendo a su aire, es algo que ha gustado mucho a una Leonor que no quiere volver a vivir bajo el estricto control de su madre. Fue en Gales donde la Princesa de Asturias comenzó a sentir la libertad en su máximo esplendor. Algo que acabó de probar cuando pasó a vivir a Zaragoza o a Marín, donde encontró que la vida nocturna es algo que le gusta mucho.

En este sentido, con la noche, también acabó llegando el alcohol a la vida de una Leonor que se ha acostumbrado a beber demasiado cada vez que sale con sus amigos. Una costumbre que no le hace ninguna gracia a una Letizia que si algo le da miedo es que su hija comience a acercarse demasiado a los peligros de la noche.

Letizia pide que los escoltas protejan a Leonor

De hecho, el miedo de Letizia con lo que pueda llegar a hacer Leonor por la noche, que ha advertido a sus escoltas, que tengan mucho cuidado con lo que su hija llega a beber. Les pide que la controlen y que, sobre todo, cuiden mucho la presencia de teléfonos móviles que puedan fotografiar a Leonor en condiciones poco decorosas para la Princesa de Asturias. Y es que, más allá de la salud, lo que de verdad preocupa a Letizia es que su hija sea captada bebiendo alcohol o estando visiblemente ebria.

Sin embargo, Leonor se niega a controlar lo que bebe. Cuando sale de noche se desentiende de la responsabilidad que conlleva su posición como Princesa de Asturias y solamente se centra en disfrutar de la velada y de sus amigos. Lo que ya le ha costado más de una reprimenda por parte de su madre, que no le tolera ni un solo error.

Así pues, Leonor y Letizia ya han tenido más de un problema por culpa del alcohol. Pues, mientras que la madre quiere que su hija sea abstemia, Leonor se esfuerza en seguir bebiendo, quiera, o no, su madre.