Letizia tenía mote en TVE, no la tragaba prácticamente nadie, no caía bien

Letizia era una mujer muy interesada por conseguir su objetivo y le tenían manía

Letizia tenía mote en TVE, no la tragaba prácticamente nadie, no caía bien

La reina Letizia es una mujer con una personalidad fuerte y determinada. Su carácter meticuloso y su afán por mantener todo bajo control la han llevado a destacar dentro de la monarquía, aunque también han generado cierta distancia con la ciudadanía. Si bien es reconocida como una de las reinas más elegantes de Europa, su popularidad como monarca no alcanza los niveles esperados. Consciente de esta situación, ha comenzado a trabajar junto a sus asesores en una estrategia para mejorar su imagen pública y acercarse más al pueblo español. Su objetivo es claro: fortalecer la institución monárquica y asegurar que su hija Leonor llegue a ser la futura Jefa de Estado.

Nada parece capaz de derribar a Letizia. Su fortaleza se hace más evidente ante los desafíos, y su determinación le ha permitido superar múltiples obstáculos. Su historia de amor con Felipe VI comenzó en un ambiente discreto, cuando coincidieron en una cena organizada en el ático del periodista Pedro Erquicia. En aquel momento, ambos estaban solteros y descubrieron que compartían múltiples intereses. Durante un tiempo, mantuvieron su relación en absoluto secreto mientras ella seguía con su carrera profesional como presentadora de los informativos de TVE, compartiendo plató con Alfredo Urdaci. Sin embargo, cuando se hizo público su noviazgo con el entonces príncipe de Asturias, la periodista tuvo que enfrentarse a numerosas críticas y comentarios poco favorables.

Letizia y Urdaci EFE

Uno de sus mayores detractores siempre ha sido Juan Carlos I, quien nunca vio con buenos ojos la relación de su hijo con Letizia. Incluso hoy en día, el rey emérito la considera responsable, en gran medida, de su situación actual, incluido su exilio. Desde el principio, los padres de Felipe dudaron de que ella pudiera llegar a convertirse en reina. Su origen humilde, su condición de plebeya, su divorcio de un antiguo profesor de instituto y el hecho de provenir de una familia separada eran factores que no encajaban en los estándares tradicionales de la realeza. A pesar de todo, Letizia logró hacerse un lugar en la monarquía y dejar atrás la influencia de la reina Sofía, consolidando su posición dentro de la familia real.

En TVE Letizia no tenía amigos 

Las dificultades para encajar no se limitaron únicamente a la Casa Real. En su etapa en TVE, tampoco logró forjar muchas amistades. La mayoría de sus compañeros la veían simplemente como una colega de trabajo con la que mantenían una relación estrictamente profesional. Al terminar sus jornadas, solía marcharse sola, y con el tiempo, varios de ellos llegaron a difundir información poco favorable sobre ella.

Se sabe que en su época como presentadora en la cadena pública, algunos la apodaban "Letizia, la ficticia", sugiriendo que su personalidad no era del todo auténtica. Se decía que mostraba una cara ante el público, pero en realidad tenía otra muy diferente en privado. Su ambición y su capacidad para avanzar en su carrera sin importar los obstáculos eran evidentes. Si su destino no hubiera dado un giro inesperado al conocer a Felipe VI, su objetivo profesional habría sido dirigir los informativos de la cadena, consolidándose como una de las figuras más influyentes en el periodismo español.