Madrugada negra en Blas de Lezo con Leonor encerrada en el camarote
Tensión y dificultades en alta mar durante el entrenamiento de la princesa

La fragata Blas de Lezo no es un lugar para débiles. Tampoco para pausas. Es uno de los buques más exigentes de la Armada Española, y allí se encuentra la princesa Leonor enfrentando la etapa más dura de su formación militar. Las jornadas arrancan a las 6:30, sin excepciones. Maniobras tácticas, formación intensiva y ejercicios físicos bajo condiciones extremas marcan el día a día.
Esta vez, Leonor no está en el simbólico Juan Sebastián Elcano, sino en pleno combate simulado. El ejercicio Sinkex-25 no da margen al error: fuego real, misiles, torpedos y navegación a más de 2.500 kilómetros de casa. El objetivo es claro: formar a futuros oficiales con la máxima exigencia. Pero el reto parece estar pasando factura a la heredera al trono.
Encerrada, mareada y desbordada
Lo que debía ser una experiencia transformadora se ha convertido en una pesadilla en alta mar. La princesa sufre, de nuevo, los temidos mareos. Vómitos, malestar y cinetosis la han obligado a encerrarse en su camarote en momentos clave. Una situación que recuerda a lo vivido en el Elcano. Y que, de momento, no parece tener solución.
Pero esta vez hay más. Los compañeros de misión que han estado con ella reconocen que Leonor no ha llegado con la preparación física adecuada. Ya se le había advertido: sin un buen tono muscular, esta fase sería un infierno. Aun así, no siguió el plan de entrenamiento previo. Y las consecuencias han llegado.
Desde la Casa Real, se insiste en que no recibirá trato de favor. Felipe VI ha sido tajante: su hija Leonor debe cumplir con las mismas condiciones que el resto. Sin atajos. Pero cada vez suenan más fuerte las dudas. ¿Está Leonor preparada para una carrera castrense tan exigente? ¿O es esta una carga que no encaja con su perfil?
Por ahora, la madrugada negra vivida en el Blas de Lezo deja más preguntas que certezas. Y una imagen de vulnerabilidad en una etapa clave de su formación como futura reina. Una madrugada que no solo puso a prueba su cuerpo, sino también su determinación como heredera al trono.