Pedro Campos, el amigo que aloja a Juan Carlos I, ha tenido que instalar rampas en casa y un baño adaptado
Juan Carlos I necesita unos cuidados muy especiales para su día a día
Los últimos resultados médicos de Juan Carlos I fueron un claro indicativo de que las cosas no estaban bien en relación a su estado de salud. El emérito lleva ya mucho tiempo acusando una serie de problemas en sus piernas que lo han llevado a tener muchas y serias dificultades a la hora de poder moverse con normalidad. De hecho, tal y como han contado personas de su entorno más cercano, Don Juan Carlos necesita una silla de ruedas para poder moverse con regularidad por su casa.
Y es que según hemos podido saber, ni con bastones ni con muletas, es capaz de caminar un Juan Carlos I que ya se vio obligado a cambiar de residencia en Abu Dabi para comenzar a vivir en una mansión completamente adaptada para sus necesidades de movilidad reducida. Ya que todo lo que sean escaleras son un obstáculo insalvable para el emérito.
En este sentido, en España también se ha mandado a remodelar una casa para que sea accesible y habitable por Don Juan Carlos. Se trata de la casa de Pedro Campos Calvo-Sotelo, que es uno de los mejores amigos del emérito y el encargado de prestarle su casa cada vez que visita Sanxenxo. Una casa que en la última visita de Juan Carlos I tenía importantes cambios estructurales, realizados por el bienestar del que fuera Rey de España.
Juan Carlos I requiere unas obras muy específicas
La realidad es que la movilidad de Juan Carlos I es tan reducida que por pequeño que pueda parecer cualquier obstáculo, se convierte en algo insalvable para el emérito, que necesita contar con asistencia durante las 24 horas del día por su llega a necesitar que lo ayuden a realizar alguna tarea doméstica. Pues el maltrecho físico de Juan Carlos I le impide hacer hasta las cosas más cotidianas de la vida.
De este modo, como ha hecho con la casa de su amigo Pedro Campos, hacen falta remodelaciones profundas en todo lugar en el que Juan Carlos I vaya a hospedarse. Ya que sino no puede hacer una vida medianamente normal, por culpa de sus problemas de movilidad en la pierna izquierda.