De mal en peor, otra frustración épica para Bagnaia en la pista
Montmeló dejó más dudas que respuestas para el piloto italiano
Pecco Bagnaia atraviesa un momento complicado en el mundial de MotoGP. Lo que debía ser una temporada de lucha por el título, junto a rivales como Marc Márquez, se ha convertido en una constante pelea contra las adversidades. Cada carrera ya no es solo un duelo por la victoria; es un desafío por mantenerse competitivo.
El Gran Premio de Cataluña en Montmeló fue un ejemplo claro. Esta pista, donde Bagnaia suele rendir a gran nivel, se convirtió en un terreno adverso. Desde los entrenamientos del viernes, las sensaciones fueron malas y el sábado no mejoró. Salir desde la posición 21º en la parrilla no era lo esperado. Pese a ello, el domingo logró remontar hasta el séptimo puesto. Sin embargo, la sonrisa no apareció. La frustración era evidente.
En Hungría, Bagnaia había mostrado signos de recuperación. Ajustes en la moto y mejor lectura de la pista le habían permitido ver brotes verdes. Pero Barcelona demostró que los avances pueden ser frágiles. El piloto italiano reconoció que, aunque la remontada fue buena, no podía estar plenamente satisfecho. El golpe psicológico es evidente y el optimismo de cara al futuro se diluye.
#CatalanGP 🇪🇸
— Pecco Bagnaia (@PeccoBagnaia) September 8, 2025
Race: P7
I certainly won’t remember it as one of the best Barcelona ever, but it was important.
Ci vediamo a Misano ❤️ #GoFree pic.twitter.com/DTULDcI0zx
Mirando hacia Misano
Ahora llega un momento crítico. Este fin de semana, el Gran Premio de Misano será clave. Se trata del GP “de casa” para Bagnaia y un test real de su estado actual y del potencial de la Ducati. Necesita recuperar confianza y demostrar que puede volver a ser competitivo.
Pecco sabe que repetir un fin de semana como el de Cataluña sería un golpe casi definitivo. Incluso el segundo puesto en el mundial empieza a verse como un objetivo lejano. Para soñar con luchar por el título la próxima temporada, debe reencontrar rápidamente las sensaciones que lo llevaron a ser bicampeón.
El piloto mantiene cautela y realismo. “Prefiero esperar a Misano y ver qué puedo hacer”, ha dicho. La estrategia será no cometer los mismos errores y aprovechar cada oportunidad para medir su rendimiento. La presión es alta, pero la motivación sigue ahí. Bagnaia necesita un buen resultado, no solo por puntos, sino para recuperar la confianza que lo caracteriza. El reloj avanza y la temporada continúa; la pregunta es si Pecco logrará levantarse de esta racha de frustraciones y volver a la pelea por la gloria.