Pecco Bagnaia al borde del abismo y pide ayuda desesperada

Pecco Bagnaia atraviesa su momento más complejo y recurre a Ducati para encontrar una solución

Pecco Bagnaia al borde del abismo y pide ayuda desesperada

Francesco Bagnaia es consciente de que su temporada en MotoGP no va como esperaba. Desde el inicio del año, ya intuía que las cosas no iban a ser fáciles. Su objetivo era claro: pelear por el título, tal y como lo hizo en los cuatro últimos años, donde ganó dos campeonatos. Pero el 2025 ha sido muy diferente. El italiano se ha visto superado por muchos pilotos, y lo más alarmante es que no ha logrado ni siquiera ser la principal amenaza para Marc Márquez, su nuevo compañero en el Ducati Lenovo Team.

El verdadero rival de Marc ha sido, sorprendentemente, el hermano pequeño de este, Álex Márquez. El piloto español ocupa el segundo puesto en la clasificación general, mientras que Pecco se ha quedado atrás. No solo ha tenido que lidiar con la presión de su compañero, sino que también ha sido superado por pilotos como Fabio Quartararo, Johann Zarco y Maverick Viñales. La falta de consistencia y su incapacidad para encontrar el ritmo han marcado el tono de una temporada que se complica más cada vez.

Una pérdida de confianza y la llamada de auxilio

El problema de Bagnaia no es solo la falta de adaptación a la nueva Desmosedici GP 25. Lo más grave es que ha perdido la confianza en sí mismo. Lo que antes era un piloto imparable los domingos ahora se muestra errático, inseguro y con miedo. Por primera vez en su carrera, el campeón parece estar en crisis. Intentó todo lo que estuvo a su alcance: configuraciones nuevas en su moto, probar piezas diferentes y hasta copiar los métodos de Márquez. Sin embargo, la distancia con el líder del campeonato, Marc Márquez, ya supera los 70 puntos.

Después de varios errores y caídas en las últimas pruebas, Bagnaia ha llegado al punto de pedir ayuda. Cansado de no encontrar la solución por su cuenta, recurrió a los responsables de Ducati, como Davide Tardozzi y Gigi Dall’Igna. "No siento nada, no tengo feeling. Necesito una solución completa", admitió. Pecco sabe que tiene la velocidad, pero sin el “feeling” necesario, no puede esperar hacer milagros. El futuro de Bagnaia en este campeonato está más incierto que nunca, y su búsqueda de ayuda es un claro reflejo de su desesperación por recuperar su mejor versión.