La Sampdoria perderá un crack que deslumbra cuando está bien de peso
Con los días contados
La Sampdoria no ha comenzado la Serie A con el paso firme que esperaba su presidente, Edoardo Garrone, que en el último mercado de fichajes invirtió 25 millones de euros para que la plantilla de Marco Giampaolo fuera de las más competitivas del torneo. Al menos, los dirigentes supieron retener a sus jugadores más destacados, pese a que algunos de ellos disponían de propuestas para salir del equipo, como fue el caso de Luis Muriel, el colombiano que la pasada temporada fue importante por su aportación al sistema ofensivo.
En espera de una buena racha de resultados que sitúe al equipo en la zona más alta de la clasificación, en el plano individual está volviendo a destacar Muriel, por lo que no está pasando desapercibido ni para los clubs que ya intentaron su fichaje ni para otros que ya son sus nuevos pretendientes. La clave en el juego del delantero está en su peso, ya que Muriel está obligado a cuidar su dieta al detalle porque su tendencia natural es la de coger peso. Cuando se mantiene en los 72 ó 73 kilos, el de Santo Tomás se muestra imparable para los zagueros.
Son esas cualidades, la verticalidad con una gran velocidad y unos espectaculares regates, la causa por la que Muriel vuelve a deslumbrar, como ya lo había hecho también en Italia, antes en las filas de Udinese. Entre los viejos interesados en el colombiano está, entre otros, el Torino, mientras que el último club en fijarse en él es el Nápoles. El presidente Edoardo Garrone no pondrá fácil su salida, ya que no comenzará negociación alguna por menos de 12 millones de euros, que es la cantidad mínima que cree justa por la ficha del ‘cafetero’.
José Benjamín