Sus números tras su regreso al los terrenos de juego
El canario no acaba de arrancar. Su juego no se parece al de la temporada pasada
El Bernabéu sigue esperando a Jesé, cada vez con más impaciencia. El jugador lleva ya tiempo entrando en las convocatorias después de su calvario y de meses de ausencia por su grave lesión de rodilla, justo por estas fechas, ante el Schalke 04 la temporada pasada. Entonces se encontraba en su apogeo como jugador del primer equipo e iba a más. Pero después de haber vuelto, de momento no ha logrado ser el mismo.
No es una buena noticia. No sólo por las expectativas (enormes) y las esperanzas que el club tiene depositadas en el que es, dicen, uno de los futbolistas con más talento de los últimos años en el fútbol español, sino porque Jesé realmente empieza a ser necesario para Carlo Ancelotti. Sobre todo sus goles. Sólo lleva dos desde que regresó, uno de ellos anotado en su reaparición, en Copa y contra el Cornellá. Más valor tuvo el que marcó hace pocas fechas en casa ante el Sevilla (2-1). Ese tipo de aportaciones son las que está necesitando un equipo que ha visto cómo la BBC, en una crisis de juego y goles que difícilmente se recuerdan, lleva menos tantos que Leo Messi por sí sólo en 2015.
La pasada campaña, Jesé empezó siendo el descarte de Ancelotti en bastantes partidos. No disponía de minutos. Benzema y Morata le comían el sitio, e incluso Di María o Isco impedían también que pudiera entrar en la dinámica de cambios de los encuentros, ya que Bale, Benzema y Cristiano, además de Modric y Xabi Alonso jugaban siempre. Pero poco a poco, rebañando cada rato que el italiano le sacaba, fue arañando no sólo más minutos, sino pequeñas dosis de protagonismo. Para un jugador de su clase y su posición, si quieres contar más para el entrenador, sobre todo valen los goles. Jesé cumplió en este apartado. Demostrando una cualidad muy poco común para un debutante canterano, no solía errar las pocas ocasiones de que disponía y las lesiones de Bale le dieron más minutos. Hasta lesionarse había marcado 9 dianas, 5 de ellas en Liga y una especialmente bonita para él en el derbi ante el Atlético de Madrid en Copa. Un gol que apuntaló una sólida victoria que permitió al Madrid pasar de ronda (3-0).
Esta temporada, Jesé, con los dos goles antes mencionados, acumula apenas una quinta parte de los minutos totales que jugó la temporada pasada. Su media de goles por encuentro ha bajado del gol cada 141,44 minutos a uno cada 142. No es un empeoramiento excesivo, pero jugadas como el fallo ante el Villarreal a puerta vacía, un tanto que hubiera supuesto la victoria del equipo, le penalizan mucho a ojos de algunos, al mismo tiempo que se suceden los rumores sobre su posible marcha como cedido en verano. Juega más estático y ha perdido esa capacidad para correr y encarar que incluso a algunos les recordaba a la de Cristiano. Lo que parece claro es que él tiene la llave para descartar esas informaciones. Si regresa al nivel de antaño, será una seria competencia para cualquiera de los tres delanteros titulares.