El golazo de Bale incendia al Real Madrid: el 'recadito' del galés con destino Barça

El golazo de Bale incendia al Real Madrid: el 'recadito' del galés con destino Barça

El expreso de Cardiff acude al rescate del equipo blanco cuando más le necesitaban.

Apenas se hablará de ello en estos términos, pero si alguien sale bien reforzado una vez más de Anoeta tras la gran victoria del Real Madrid sobre la Real Sociedad, ese es Zinedine Zidane. Contra todo pronóstico, el técnico francés volvió a engañar a casi todos con un once inicial que parecía claro debido a las bajas que arrastraban los blancos y a sus necesidades acuciantes de sumar puntos, y sorprendió con un nombre propio: el de Borja Mayoral. Por otro lado, el golazo de Gareth Bale supone el enésimo triunfo de la paciencia por bandera que el entrenador galo exhibe absolutamente en todo.

 

Muchos apostaban por la alineación de Dani Ceballos este domingo, pero Zidane no renunció a jugar sin referencia arriba. Puso a Borja Mayoral cuando muy pocos lo esperaban, demostrando que confía en los suyos y que si hay bajas arriba, es coherente y pone a los de arriba que tiene disponibles. Es verdad que empieza a tener cierta deuda con el ex bético y con Llorente (algo menos en este caso), pero por ahora, Zizou sigue rotando y teniendo al vestuario enchufado.

 

Y si lo tiene así es porque demuestra confianza ciega en los suyos. Tanta como para admitir que, tras la marcha de Morata y Mariano, quizás falte un nueve en la plantilla y al mismo tiempo asegurar que está contento y tranquilo con lo que tiene. Del mismo modo, Zidane no se ha bajado nunca del barco de Gareth Bale. Incluso en los peores momentos del galés le ha apoyado desde la sala de prensa y con sus decisiones deportivas, siempre dentro de los límites razonables. Ante la Real, el peor Bale que se recuerda (hablando de rachas, de periodos de tiempo) marcó el tanto de la tranquilidad tras un carrerón de 70 metros y una velocidad punta de 35 kilómetros por hora. Hace falta ser un absoluto crack para eso.

 

Bale

 

Y Zidane lo sabe. Era consciente de que sin Cristiano ni Benzema debía darle la responsabilidad al expreso de Cardiff por muy mal que estuviese. Y lo estuvo durante gran parte del choque ante la Real. Sin ritmo, sin capacidad de asociación a la hora de generar peligro y sin apenas aparecer en zonas 'calientes' del ataque madridista. Pero al final, logró brillar. Y lo hizo porque Zidane le mantuvo en el terreno de juego.

 

Ese gol puede darle la vida al propio Bale. Necesitaba una inyección de moral para salir del agujero en el que se había metido. Y poco a poco se está encontrando. Así se lo hace saber a todos dentro del vestuario, y así quiere seguir progresando en estas próximas fechas. Gareth es consciente de que su momento en el Real es ahora o nunca. Y que si logra triunfar, puede llegar a ser ese líder que todos esperan. De entrada, piensa seguir así para que esos cuatro puntos que el Barça mantiene sobre el Madrid no sean nada. Y de aliado tiene a Zidane para conseguirlo.