¡La que se ha liado en el Real Madrid! La revolución que arrincona a Zidane tras el Borussia

¡La que se ha liado en el Real Madrid! La revolución que arrincona a Zidane tras el Borussia

El encuentro frente al Dortmund que cerró la fase de grupos de la Champions League dejó muchas conclusiones a analizar por el técnico francés.

Mucha tela que cortar. El choque que el Real Madrid y el Borussia Dortmund disputaron en el Santiago Bernabéu cerró la primera fase de una Champions League en la que, por ahora, el equipo blanco sigue teniendo todas las opciones de ganar su tercer entorchado consecutivo, pero que al mismo tiempo ha puesto de manifiesto que los de Zidane van a tener que subir el nivel si quieren realizar semejante gesta, hasta ahora no lograda por nadie en la era moderna de la competición. Los dos pinchazos ante el Tottenham, rival duro y competitivo pero para nada un candidato al título, dejan a los madridistas segundos en un grupo en el que, por lo demás, todo hay que reconocerlo, se dio la talla y con creces, ganando los otros cuatro partidos.

 

Dos de ellos, frente a un Borussia Dortmund que es evidente que no es el temible equipo de otras temporadas, pero que siempre resulta, como todo conjunto alemán, un rival complicado de tumbar. La de anoche fue una estupenda prueba de fuego, sin nada en juego pero con la credibilidad de un equipo con ya poco crédito ante una afición impaciente, para una inmensa mayoría de suplentes que, en una realidad dura y diametralmente opuesta a la que se vivió el año pasado, no están contando con los minutos ni con la confianza que se presuponía iban a contar por parte de su entrenador.

 

Real Madrid Borussia Dortmund

 

Pero los partidos ya van pesando sobre las piernas de los futbolistas, y quiera o no, Zinedine Zidane tiene que ir empezando a tirar de su banquillo. Lo hizo de menos a más este miércoles, colocando a Theo Hernández y Borja Mayoral de titulares, y dando después entrada a Dani Ceballos y Marcos Llorente. Cuatro de los cinco fichajes realizados este verano (Jesús Vallejo se perdió el choque por lesión) que compartieron juego sobre el césped durante casi media hora, en Liga de Campeones y ante un enemigo de perfil medio. La prueba más dura para ellos hasta ahora. Y rodeados de un equipo que ya contaba con varios elementos más secundarios que titulares, como Nacho, Lucas Vázquez o Mateo Kovacic.

 

Media hora para la esperanza

 

Con Marco Asensio, también jugando, ya como primera espada pero también como estandarte de esta generación joven en la que el club ha depositado sus esperanzas de futuro, los chicos realizaron, seguramente, su mejor actuación en lo que llevamos de temporada. Theo fue de menos a más, y aunque evidencia todavía una pasada evidente de revoluciones a la hora de canalizar algunos ataques y meter centros, se va entonando; Dani Ceballos, seguro en el pase, sobrio en la circulación, sin excesivos adornos y sin pérdidas de peso, apunta a futbolista extraordinario si no se tuerce. Llorente estuvo fino en el corte y también mejoró sus últimas actuaciones, y Mayoral volvió a pedir paso apretando con el gol que abrió la lata en el partido (mientras el club debate sobre si traer o no a Icardi, él lleva 5 goles en 14 partidos).

 

Son buenísimas noticias para Zidane, que no es ni será nunca sospechoso de ser un entrenador que no confíe en los jóvenes ni tenga valentía para hacer rotaciones casi sin importarle el rival (lo que hizo la pasada temporada justifica cualquier duda en este sentido). Es evidente que si los suplentes no estaban jugando más es porque el galo no les veía preparados, pero después de lo de este miércoles, quizás empiecen a estarlo. Y dentro de tres días el equipo se enfrenta al Sevilla, de nuevo en el Bernabéu, con una defensa absolutamente en cuadro y con el Mundial de Clubes a la vuelta de la esquina. ¿Ideal para más rotaciones? Lo veremos, pero desde luego, el vestuario aprieta por ello... otra dura papeleta para el francés.