Revolución en la Selección. Luis Enrique busca no sacar la calculadora

Segundo partido de la Nations League para la selección española en el que los de Luis Enrique no deberán pinchar para evitar que empiece a aparecer la presión. La exigencia de un grupo en el que solo el primero pasa a la fase final obliga a España a dar una buena imagen tras el pinchazo inicial en casa frente a Portugal.

En este caso, será la República Checa la que intente poner en aprietos al combinado nacional. Un equipo checo que derrotó a Suiza en el primer partido y que se coloca primera de grupo. Puesto que podría asegurar aún más, ya que de vencer a España dejarían ya a cinco puntos a los nuestros en la clasificación.

Partido exigente el que afrontará un seleccionador, Luis Enrique, que planea rotar ampliamente el equipo para la cita. En defensa, podrían aparecer Carvajal, Íñigo Martínez, Eric García o Marcos Alonso, lo cual supondría un cambio total de la línea con respecto a la que disputó el partido del Villamarín. En el centro del campo, Koke entraría por Carlos Soler, y arriba gozarían de minutos hombres como Raúl de Tomás o Dani Olmo.

El encuentro se celebrará en el Eden Stadium de Praga y se espera un ambiente menos hostil del esperado debido al alto precio de las entradas, 90 euros de mínimo. En la previa del partido, sin embargo, Luis Enrique avisó de que esperan un rival valiente al lado de su afición y de máxima exigencia. Y es que está quedando patente en esta Nations League que no se puede menospreciar a ningún equipo de los grupos de élite. Prueba de ello, son las derrotas de grandes selecciones como Francia o Inglaterra frente a combinados a priori de menor nivel como Dinamarca o Hungría.

 
Pero esto ya es más que sabido en el seno de una selección que si algo ha demostrado desde la llegada de Luis Enrique es saber competir en todos los escenarios posibles. Así se vio en la Eurocopa, sabiendo sufrir cuando tocó y sacando adelante partidos contra rivales muy rocosos como el que se espera que sea la República Checa.