En Málaga tragan sapos con el último capricho (impuesto) por el Jeque

En Málaga tragan sapos con el último capricho (impuesto) por el Jeque

Mastour podría tardar hasta cuatro meses en debutar, cuando lo deseado era quedarse con Darder

La semana de selecciones y partidos internacionales está sirviendo para que los equipos trabajen con los pocos futbolistas que quedan en sus plantillas hasta la reanudación de la competición doméstica. En el caso del Málaga, los andaluces andan a vueltas, además de esto, con el último fichaje hecho por el club andaluz, que parece que de entrada va a causar más líos que otra cosa debido a sus condiciones particulares.

 

Hablamos del ítalo marroquí Mastour, llegado procedente del Milan. Ya contamos en DB que se trataba de un mero 'capricho' por parte del Jeque Al-Thani, que pasó por delante de las cabezas 'decisorias' en materia de fichajes en este asunto (Mario Husillos, director deportivo, y Vicente Casado). También ha tenido poco o nada en cuenta el criterio de Javi Gracia, técnico y arquitecto del "milagro" de este gran Málaga que ha dado la talla en la Liga BBVA en los últimos meses pese a sus problemas económicos, y con gran parte de sus jugadores procedentes de la cantera.

 

Precisamente, Gracia anda muy mosqueado por la venta final de Sergi Darder al Olympique de Lyon francés, justo al terminar el periodo de fichajes estival. Pese a que el centrocampista quisiese irse, al final el técnico pierde una pieza clave en sus esquemas y el club vuelve a vender un futbolista cuya totalidad de los derechos no le pertenecía, con las consiguientes 'pérdidas' de potenciales ingresos. Y, para colmo, traen a un semi desconocido (muy prometedor, pero extremadamente joven) que además podría no jugar hasta dentro de cuatro meses.

 

Como lo oyen. Mastour (17 años) debe ser reconcido antes por la FIFA, ya que siendo menor de edad no puede jugar hasta que el Málaga envíe una serie de documentos al citado organismo. Estos trámites tardaron tan solo días en otros casos similares como puede ser el del noruego Martin Odegaard con el Real Madrid. Pero en el mismo club malacitano no eran tan optimistas con respecto a los plazos.

 

En definitiva, un jugador cuyo rendimiento es una incógnita, una baja significativa, otra decisión tomada a la ligera por un Jeque que aparece poco y, para colmo, un problema burocrático que amenaza con retrasarlo todo. Otra de esas situaciones que poco o nada se entienden en Málaga, donde se vive con cierto mosqueo el gobierno de Al Thani desde hace tiempo.