Las dudas de Qatar le suponen al Barça un coste de casi un millón al mes
El club debe pagar a Nike una penalización por no informar sobre el logotipo que debe estampar en las nuevas camisetas.
La paralización de la negociación con Qatar Airways para la renovación del contrato de patrocinio que le liga al FC Barcelona le está suponiendo al club barcelonista un coste de casi un millón de euros al mes. Nike necesita tiempo para fabricar las aproximadamente 1,5 millones de unidades de la nueva equipación, y tiene estipulada, por contrato, con el FC Barcelona la fecha tope de noviembre para estampar las nuevas camisetas con su patrocinador en ella. A día de hoy Nike sigue sin poder fabricar las camisetas y el asunto le supone al club la obligación de pagar la penalización.
Manel Arroyo, el directivo encargado de llevar a buen puerto el tema del patrocinador, se reunió la pasada semana con representantes del emir de Qatar para tratar de desencallar la situación. Posteriormente voló a Estados Unidos con el fin de calibrar las posibilidades de encontrar en ese país una alternativa a Qatar, aunque los resultados no parecen satisfactorios. Todo hace indicar que el FC Barcelona deberá reconducir la negociación con Qatar adaptándose a las nuevas exigencias de dicho país para seguir sponsorizando al club azulgrana.
En las últimas horas ha trascendido que Qatar se mantiene inflexible en su idea de que la imagen de Qatar tiene que seguir siendo visible, como hasta ahora, en la fachada del estadio, en su grada y también en las camisetas de entrenamiento, los tres apartados que el FC Barcelona tenía intención de suprimir. Y añade una nueva condición, la disputa del partido amistoso que el Barça debe jugar con todas sus figuras en Qatar, de acuerdo al contrato firmado por ambas partes. Dicho encuentro debió disputarse la temporada pasada, pero Bartomeu alegó problemas de calendario para anularlo, lo que significó un profundo disgusto en el emir de Qatar.
A día de hoy la situación contempla un final feliz a la negociación del FC Barcelona con Qatar, pero cumpliendo con todas las exigencias impuestas por el patrocinador, que ha enfriado su interés por el FC Barcelona ante la posibilidad de centrar sus esfuerzos en el PSG, un club que aspira a ser un grande de Europa con un accionariado mayoritariamente qatarí y sin el rechazo que genera en el FC Barcelona la presencia de Qatar en sus camisetas.