La operación sorpresa del Real Madrid se cocina en Nueva York
El club blanco ultima la nueva plantilla
No hay prisa. La premisa desde el Real sigue siendo la misma que cuenta ‘Don Balón’ estos últimos días: antes de entrar, hay que dejar salir.
Florentino Pérez trabaja en esa dirección. Aligerar la nómina blanca para hacer sitio a nuevas incorporaciones y pagar unas operaciones con un precio de mercado por las nubes. Lo bueno es caro. Así de claro. Y Zidane sólo quiere lo mejor.
El técnico del Real avisó al presidente durante la confección del nuevo curso: jugadores clave, para posiciones clave. El Madrid tiene cubierto el problema de fondo de armario. Las necesidades pasan, únicamente, por ‘captar’ auténticas figuras en las posiciones que necesitan de mayor refuerzo. Una de ellas señala al central.
Zidane quiere blindarse ante una posible sanción FIFA con el fichaje de un defensa que pueda formar pareja junto a Sergio Ramos. Un futbolista polivalente al que desde el Bernabéu ponen nombre y apellidos: David Alaba.
El defensa del Bayern de Múnich enamora en las alturas y al cuerpo técnico. Puede ejercer de central, caer en banda o cubrir tareas de contención en el medio campo. Desde el club bávaro niegan la negociación, pero en el Real confían en la presión el austríaco que quiere iniciar una nueva aventura lejos de la Bundesliga. El Real jugará un último encentro amistoso en EEUU, en Nueva York, y precisamente con el Bayern. Una fecha marcada en rojo en la cúpula blanca para abordar la operación.