Y aún falta Luis Enrique... Alves marca el camino. Lucho ya tiene fecha

Y aún falta Luis Enrique... Alves marca el camino. Lucho ya tiene fecha

El técnico del Barça lleva meses preparando sus conclusiones

La rajada de Dani Alves ejemplifica lo que está pasando en el Barça: el presidente no está sabiendo coger el toro del club por los cuernos. Tras años agarrado a la silla aún está en prácticas. A Bartomeu lo han sostenido los resultados. Nada más. Sus idas y venidas a los juzgados han sacado los colores al barcelonismo que ve como hasta el defensa brasileño encara la puerta de salida poniendo fino al mandatario y sin que en el club haya una alternativa mejor. La planificación fue nefasta. De risa. Y ahora todos los movimientos de mercado/promesas se hacen en clave electoral. Los únicos refuerzos que interesan al presidente y compañía son nombres que pueden ganar las elecciones ilusionando al socio.

 

El carioca ha marcado el camino de salida con argumentos. Un sendero por el que puede transitar Luis Enrique. El técnico está hasta arriba de los delirios, doble juego, veinte caras de 'Barto'. No se ha implicado en el nuevo curso. Ni ha querido saber nada. Tiene decidido hablar alto y claro después de la final de Berlín. Una actitud, la del 'presi', que llevó a Xavi a salir del Barcelona pitando ante la indeferencia de un Bartomeu que se cargó las opciones de continuidad de Hernández cuando le soltó que, en caso de seguir, su papel en el club sería el de parche hasta que le entidad pudiera fichar un relevo de garantías en 2016.

 

La Masia se cae a pedazos. El filial está a punto de descender a Segunda B. El modelo del fútbol base está hecho trizas. Las secciones no arrancan. Y jugadores como Alves, avisan: las cosas no se están haciendo bien. Se ganara el triplete, el doblete, pero la directiva/presidencia necesita un cambio a fondo.