Giro de guion con Carlo Ancelotti: su decisión trastoca a Florentino

Es cierto que la mala campaña del Real Madrid había dilapidado, hasta hace escasos días, las opciones de muchos jugadores de seguir formando parte de la plantilla del equipo el próximo curso. No obstante, aunque Florentino Pérez estaba dispuesto a complacer los deseos de Zinedine Zidane en cuestión de salidas, ahora la situación ha dado un giro de 180º con el retorno de Carlo Ancelotti al banquillo merengue, sobre todo en lo que concierne a dos de los jugadores que más años llevan en la disciplina madridista: Marcelo e Isco.

Ambos han ocupado el foco de las críticas de los aficionados durante las últimas campañas y por eso este verano Florentino tenía en mente tratar de buscarles una salida (a pesar de las dificultades que conlleva esto dado su elevado salario), pero el regreso del italiano a la casa blanca podría provocar un cambio de guion brutal en los deseos del presidente, ya que tanto el brasileño como el español fueron dos jugadores sumamente utilizados por el ya exentrenador del Everton durante la primera etapa de este en el Real Madrid en el transcurso de los años 2013 y 2015, donde se alzó con cuatro títulos entre los que se encuentran la décima Champions League del Real Madrid. 

Aunque en esa final disputada en Lisboa frente al Atlético de Madrid ambos jugadores partieron como suplentes, durante todo el torneo (y la temporada) fueron dos de los efectivos del equipo más utilizados por el entrenador italiano, que supo sacar lo mejor ellos para terminar alcanzando la final y, por ende, romper la sequía que atravesaba el club desde hace más de una década en cuanto a títulos europeos se refiere.

Es por eso que, aunque estos dos jugadores hayan dejado muy mal sabor de boca con su rendimiento esta campaña, su situación podría cambiar radicalmente si el italiano decide volver a apostar con fuerza por ellos, como ya hizo durante los dos primeros años en los que tomó las riendas del club. Eso sí, tanto el carioca como el malagueño han acusado físicamente el paso de los años y tendrán que trabajar muy duro durante el próximo mes para ganarse ese hueco que, hasta hace escasos días, parecía imposible que pudieran ocupar la próxima temporada en Chamartín, sobre todo si atendemos a que su alto salario podría facilitar poner en marcha el capítulo de fichajes blanco.