Los tienen que separar: Leo Messi protagoniza una pelea en el Barça
Por suerte, no pasó a mayores de milagro
El Barça consiguió cumplir con los pronósticos, y no dio opción alguna al Real Valladolid. Cuajaron un partido bastante sólido, aunque sin demasiada brillantez, y cumplieron con el trámite, venciendo a un conjunto que no vive un buen momento en absoluto. De hecho, ocupan plazas de descenso en La Liga Santander. El resultado acabó siendo cómodo, pero tampoco se puede decir que fuera una actuación brillante, ni mucho menos. Ronald Koeman innovó, y probó con defensa de tres centrales, algo que no descarta repetir, pues encajan demasiados goles.
Y precisamente uno de los zagueros, Clément Lenglet, que regresaba al once inicial tras varias semanas siendo suplente, abrió el marcador. Antes del descanso, Martin Braithwaite, que al igual que el internacional francés también es señalado por el público y la prensa, puso el segundo, y dejó todo encarrilado. Eso si, en la segunda mitad los ‘pucelanos’ inquietaron la portería de Marc-André ter Stegen, que tuvo que intervenir en un par de ocasiones. Hasta que apareció Leo Messi para meter el tercero.
Precisamente el argentino fue noticia, pero no por lo ocurrido sobre el terreno de juego. Y es que se ha conocido que estuvo metido en una pelea con un compañero, que se ha caído de la convocatoria. Sí, es Ousmane Dembélé, que regresaba tras su lesión y que ya estaba disponible para el técnico holandés, pero que se quedó en casa y no viajó al Estadio José Zorrilla. Según argumentaban, porque aún no estaba cien por cien recuperado de sus molestias.
Pero la realidad es bien diferente. Explican que la verdadera razón es su enganchada con el capitán del Barça en uno de los últimos entrenamientos, por motivos que todavía se desconocen. Aunque, por suerte para el campeón del Mundial de Rusia en 2018, al ‘10’ no le queda mucho más tiempo en el Camp Nou. Parece muy claro que solo uno de los dos podrá seguir la próxima temporada, y ‘el Mosquito’ es el que tiene todas las papeletas.
El futuro de Messi apunta, irremediablemente, al Manchester City de Pep Guardiola, o, sobretodo, al Paris Saint-Germain de Neymar Junior y Kylian Mbappé.
Así es.
