Morata ataca donde más duele al madridismo. Ramos va a por él

Cuando Álvaro Morata salió del Real Madrid por segunda vez tenía claro que esa sería la segunda y última vez. Tras una primera experiencia en la Juventus de Turín volvió a su casa para triunfar pero tras ese segundo intento sin los resultados esperados el madrileño tuvo que abandonar de nuevo la capital de España rumbo a Londres para seguir ganándose una reputación y un nombre como delantero en Europa. 

Y así lo hizo. Al igual que en Turín, Morata se hizo más y más duro, se curtió en una liga que si por algo destaca es por intensidad y por no escurrir el bulto. Allí aún quedan centrales de los que ya rara vez se ven en el resto de ligas europeas, esos a los que te da miedo ganar en carrera pero te da más pánico aún no hacerlo… Y entonces Morata volvió a su ciudad natal, esa en la que siempre ha querido jugar, pero esta vez lo hizo para defender los colores colchoneros. Álvaro había pasado de vikingo a indio y ese es un camino que no tiene vuelta atrás. 

Con el Cholo Morata está rindiendo a un gran nivel esta temporada, haciéndose con el puesto de titular por delante de un Diego Costa que es incapaz de alcanzar el nivel de su primeros años en el Atlético. Y este sábado, en su vuelta al Bernabéu, Morata dejó claro que es indio y a mucha honra. Esto pasa mucho con aquellos que han estado en un bando y han cruzado al otro, que tienen a enviar mensajes contundentes reforzando su sentimiento de pertenencia al nuevo bando. Nada nuevo.

El 9 del Atlético de Madrid lo ha hecho vía twitter a través de su cuenta y como era de esperar las respuestas no se han hecho esperar. El primero que se ha mostrado contrariado ha sido el capitán blanco Sergio Ramos, quién ha atacado en privado al internacional atlético por acompañar el mensaje de la imagen de la polémica, el posible penalty que le hace Casemiro en el minuto 50 de partido. Ambos se verán, si Morata sigue a este nivel, en la selección en el mes de marzo y allí acercarán posturas.