Quique Setién se vuelve a quejar y la plantilla pierde la fe en él

Quique Setién se vuelve a quejar y la plantilla pierde la fe en él

¿Motín en el equipo en contra del entrenador?

Quique Setién sabe que vive en el alambre. No puede relajarse porque si no gana LaLiga y hace un buen papel en la Champions, si es que se vuelve a jugar, sabe que tendrá muchas papeletas de salir del equipo blaugrana. Los equipos grandes no perdonan, son así. Una derrota es inadmisible, dos seguidas es motivo de despido.

El cántabro firmó por dos años y medio cuando llegó el pasado enero, pero las circunstancias pueden hacer que todo cambie. Primero fue el roce entre la plantilla y su segundo entrenador, Eder Sarabia. Luego fue el parón del coronavirus lo que dejó tocado al entrenador. Sin la continuidad que sus métodos necesitan el equipo perdió unos meses claves en la reconstrucción.

Ahora la plantilla parece que se ha hartado de las excusas, infinitas, del técnico. El otro día dijo que los cinco cambios podían perjudicar a un equipo como el Barcelona, acostumbrado a llevar el peso de los partidos en los minutos finales. Decía que con los cinco cambios podría sufrir más y que el Barcelona tendría una desventaja.

La plantilla se lleva las manos a la cabeza. Todos han coincidido en Primera División en que los cambios van a venir mejor a los equipos grandes, pues tienen más y mejor fondo de armario. Sin embargo, Setién, como siempre, se pone la venda antes de tener la herida.

La plantilla está harta de las excusas del cántabro y así se lo ha hecho saber a la cúpula directiva. Ahora entrena al Fútbol Club Barcelona, no está en Las Palmas o en el Betis. El Barça gana partidos porque tiene que ser mejor equipo que el rival, no importan más circunstancias. Si Setién no entiende eso…

Muchos en Barcelona ya hablan de un motín de la plantilla si el ex técnico del Lugo no cambia sus métodos y sobre todo sus palabras. La confianza parece rota.