La salida que Messi esperaba y no llega: Bartomeu contra las cuerdas

Por encima de todas las personas que Messi querría que abandonasen el club este verano está Eric Abidal. Eso lo sabe de sobra un Bartomeu que se está viendo obligado a caminar sobre la cuerda cual contorsionista intentando mantener un equilibrio prácticamente imposible entre las dos opciones: contentar a Leo o mantener a uno de sus hombres de confianza, Abidal. 

La historia no es nueva, ni mucho menos. Allá por el mes de enero se desveló que Leo Messi y Eric Abidal no estaban en sintonía y que los dos tenían mucho que recriminarse el uno al otro. Para que la guerra no fuese de puertas para afuera (Messi habló claro en una entrevista dejando ver lo distante que estaban ambas posturas) Bartomeu medió entre los dos y les instó a decirse las cosas a la cara y no en los medios de comunicación. 

El parón competitivo ayudó a calmar las aguas pero no a que se olvidase todo. De hecho, Messi ha vuelto a recordar a Bartomeu que el argentino no quiere al francés en la secretaría técnica ni un segundo más. El presidente culé está en una encrucijada porque Abidal es de los pocos que siente cerca y fiel a su persona (no olvidemos que esta primavera dimitieron varios miembros de la junta directiva por discrepancias con el presidente Bartomeu) pero por otro lado disgustar a Messi en un tema tan capital, y más en año de renovación, es algo que hace palidecer a Bartomeu. 

En los próximos días el presidente deberá tomar una decisión que puede marcar su final: escuchar a Leo y cargarse a una de las pocas personas que siente cerca o disgustar al hombre franquicia y arriesgarse a ser el presidente que no fue capaz de mantener a Leo en el conjunto culé. Messi o Abidal, esa es la cuestión.