Simeone puede respirar: el titular del Atleti ya no interesa al Barça
Su rendimiento ha caído en picado
Felipe Monteiro fue vinculado al Barça hace unas semanas, para fortalecer la zaga, una posición en la que tienen grandes problemas. Se habían fijado en el crack del Atlético de Madrid, que llegó hace poco más de un año, y que tuvo un impacto inmediato, ofreciendo un rendimiento sobresaliente. Porque no tardó en hacerse con un hueco en el once inicial, y, a pesar de la irregular temporada que hicieron, él en todo momento estuvo sólido, seguro y fiable.
Se ganó la confianza de Diego Pablo Simeone, e hizo olvidar, más o menos, a la figura de Diego Godín. Le comió la tostada a otros como Stefan Savic y José María Giménez, mucho más contrastados y adaptados, y acabo siendo el jefe de la retaguardia. De esta manera, demostró porque acertaron pagando los 30 millones de euros que costó sacarlo del Oporto, donde formó pareja con Eder Militao, ahora en el Real Madrid, y con el mítico Pepe.
Porque su contratación generó dudas, ya que tenía experiencia en la Champions League, pero no en ninguna de las cinco grandes ligas. Además, ya aterrizó con 30 años, y no podían tener paciencia, así que esperaban que ofreciera un rendimiento inmediato. Y el internacional brasileño no decepcionó, sin lugar a dudas, convirtiéndose en uno de los pilares del proyecto. Por eso, querían renovarle, pues queda libre en 2022.
En el Camp Nou estaban atentos, y tenían constancia de eso, y no descartaban en absoluto intentar llevárselo este próximo verano. Sin embargo, el ex del Corinthians ha bajado notablemente sus prestaciones, y ya no es ese defensor contundente, fuerte, seguro y fiable que venía siendo. Y ha provocado que en el cuadro culé ya no estén interesados, y prefieran centrarse en otras opciones. Una buena noticia para ‘el Cholo’, sin lugar a dudas.
No tanto para un Felipe que debe de trabajar para volver a ser el mismo de siempre. Todavía confían en él, y esperan que solo sea un bache, y pronto se ponga las pilas. Tendrá que esforzarse al máximo, y ya ha demostrado de lo que es capaz.
Caso abierto.