Zinedine Zidane estalla y el Madrid tiembla: ¡amenaza a la vista!

No están para bromas. La temporada pasada tiene el rumor a gritos todavía ondeando en las cabezas de todos los aficionados blancos y la hinchada quiere resultados ya, más cuando parece que el Barça está renqueante y se le puede meter mano. Pero nada, a este nuevo Madrid (que tira poco de lo nuevo y mucho de lo ya conocido), con escasas pinceladas, le está costando arrancar. Ganó con suficiencia al Celta de Vigo, 1-3, empató en casa con el Real Valladolid, 1-1, y volvió a igualar con el Villarreal, 2-2, en la última jornada.

Y lo peor no es eso, es que de lo más destacado está siendo precisamente el gran descarte de Zinedine Zidane, Gareth Bale, que no solo fue el mejor en el enfrentamiento contra el submarino amarillo, sino que parecía la única pieza capaz de ofrecer algo diferente en el ataque blanco. Dicho partido fue un cúmulo de infortunios en el conjunto merengue, con un desastroso Lucas Vázquez y un Sergio Ramos muy desafortunado. Además al final Bale, que marcó los dos tantos de los de Zizou, acabó expulsado y no podrá jugar contra el Levante.

Y, quien lo diría hace un mes, el Madrid va a echar de menos al galés, lo que ha hecho que una circunstancia detectada por el míster galo le haya hecho enfurecerse. Zidane está furioso, iracundo, con la convocatoria y los calendarios de las selecciones, especialmente las sudamericanas, ya que va a perder a cuatro piezas que no volverán al trabajo hasta 24 horas antes del duelo liguero.

Zizou cree que eso es un gravísimo agravio y va a perjudicar seriamente a un Madrid que tiene que ganar sí o sí ante un rival, en teoría, muy inferior al conjunto de Cocha Espina. Los brasileños Casemiro, Militao y Vinicius, y el uruguayo Fede Valverde solo podrán preparar el duelo ante el conjunto valenciano el próximo viernes, ya que los de Zidane se ven las caras con los blaugranas el sábado a las 13 horas. Un percance duro para Zidane, que planea alternativas a estos cuatro jugadores.