Otro fiasco para Bartomeu y se lo endosa CR7 ¡Ni Lautaro, ni Neymar, ni él!

Otro fiasco para Bartomeu y se lo endosa CR7 ¡Ni Lautaro, ni Neymar, ni él!

El Barcelona lo tenía encarrilado y ahora se les escapa

Un buen fiasco se van a llevar no solo los aficionados del FC Barcelona y la junta directiva blaugrana, sino parte de la plantilla que veía en Miralem Pjanic un excelente refuerzo de cara a la próxima temporada en una medular necesitada de calidad y hambre de trabajo defensivo. Pjanic ofrecía ambas cosas pero el jugador bosnio parece haber tomado otro rumbo, como la Juventus de Turín de Cristiano Ronaldo, que ya no quiere negociar con el Barça.

Los juventinos rompen toda negociación con el club que preside Josep Maria Bartomeu porque ha aparecido en el horizonte un club poderoso de la Premier League con una oferta mucho mejor que la de los catalanes, y es la que van a tomar. Es mejor en el trato y en las variables. Y es que el Chelsea de Roman Abramovich se ha interpuesto en el camino blaugrana para robarles al talentoso futbolista bianconeri.

¿Cómo? Pues bien, al equipo italiano la operación por Pjanic a cambio de algo de dinero e Ivan Rakitic o Arturo Vidal es un movimiento que, aún a sopesar, no les interesa tanto, sobre todo a su entrenador Maurizio Sarri, como la que propone el magnate ruso. Y es que si hay una cosa que dejó en lo futbolístico poso en el míster italiano a su paso por la capital de Inglaterra y Stamford Bridge fue el centrocampista defensivo Jorginho.

Sarri opina que Jorginho es el futbolista que hace falta para la medular y que el bosnio ya no puede ser por falta de interés. Simplemente la ilusión se ha roto entre el jugador y la Vecchia Signora, de ahí que de forma armónica todas las partes acepten y Pjanic ponga rumbo a Inglaterra. El joven y nuevo proyecto blue anima al jugador de Tuzla pero sobre todo hay un hecho decisivo, a Sarri le convence el mediocampista brasileño. Con estas dos certezas sobre la mesa, sobra el Barça. Acuerdo inminente y un palo más para los culés: Lautaro se esfuma, Neymar se aleja y Pjanic se difumina.