Pep Guardiola le roba al Barça al nuevo Dani Alves

Pep Guardiola le roba al Barça al nuevo Dani Alves

El jugador era la gran esperanza para el lateral derecho del club blaugrana

El Barcelona quiere reforzar el lateral derecho. El fichaje de Nelson Semedo fue esperanzador. El ex jugador del Benfica venía con la dura tarea de hacer olvidar a un mito del equipo culé como es Dani Alves. Ser igual era difícil, ser mejor era imposible. Pero dar un rendimiento tan pobre es inadmisible para una entidad como la del Fútbol Club Barcelona. Durante muchos partidos ha jugado Sergi Roberto de lateral derecho. Wagué es invisible para todos y el equipo tiene un agujero en esa posición. La dirección deportiva puso los ojos en Brasil para fichar al que allí dicen que es el sucesor de Dani Alves en la selección brasileña. Pero Pep Guardiola se les ha adelantado.

Y es que el técnico de Sampedor tiene en el City un buen número de ojeadores repartidos por todo el mundo. Y concretamente en Brasil tienen una base donde envían informes casi semanalmente sobre jugadores interesantes para la entidad de Manchester. Así se hicieron con Gabriel Jesús, al que tenían en cartera desde mucho antes de hacerse oficial su traspaso desde el Palmeiras. Ahora han presentado una oferta que parece final sobre Yan Couto. El 2 de la selección sub 21 de Brasil y que recuerda a Dani Alves.

La oferta es de 9 millones más 5 en variables. Su club, el Coritiba no puede decir que no. Sería el mayor traspaso de una entidad que no tiene la solera ni la historia del Flamengo o Santos, de donde llegaron Vinicius Junior, Reinier y Rodrygo por mucho más dinero.
El jugador quiere jugar en Europa y aunque le seducía España la opción de ser entrenador por Guardiola le parece una oportunidad única. Un sueño hecho realidad para un jugador que no debutado como profesional y que puede ver como en un mes está viajando a Madrid para enfrentarse el Real Madrid en Champions.

El Barça no entienden como otra vez se les vuelven a adelantar. No ganan una batalla. Cada vez en el campo lo hacen menos, pero en los despachos empieza a ser dramática la situación.