Ancelotti le permitía llegar media hora tarde al entreno, Xabi Alonso, no: si se retrasa 5 minutos no juega
La nueva disciplina de Xabi Alonso no le concede margen alguno para el error

La disciplina de Alonso ha empezado a modelar un nuevo Real Madrid, más serio y compacto, donde todos, incluso los más mediáticos, deben demostrar por qué merecen estar ahí. Y Vinícius, para mantenerse, tendrá que adaptarse.
Xabi Alonso, conocido por su rigor táctico y su exigencia en el día a día, no ha tardado en dejar claro que no hay jugadores intocables, ni siquiera figuras mediáticas como Vinícius. En uno de los primeros entrenamientos de pretemporada, el brasileño llegó con un pequeño retraso, confiando en que la costumbre de la etapa anterior se mantuviera. Para su sorpresa, Xabi no dudó en dejarlo fuera de la sesión principal como escarmiento. “Aquí nadie está por encima del grupo”, habría sentenciado el técnico.
Xabi Alonso impone orden: Vinícius ya no tiene privilegios
La llegada de Xabi Alonso al banquillo del Real Madrid ha traído consigo un cambio profundo en la disciplina interna del vestuario. Uno de los primeros en notarlo ha sido Vinícius Júnior. Bajo la dirección de Carlo Ancelotti, el brasileño gozaba de cierta flexibilidad, e incluso se le permitía llegar con hasta media hora de retraso a algunos entrenamientos sin consecuencias visibles. Sin embargo, con Alonso, el margen de tolerancia se ha esfumado: cinco minutos de demora son suficientes para quedarse fuera de la convocatoria.
Este gesto, aparentemente simbólico, ha tenido un fuerte impacto dentro del vestuario. Muchos jugadores lo interpretan como una señal de que se terminó la permisividad. Alonso quiere un equipo comprometido, puntual y profesional, en el que todos respondan al mismo estándar de exigencia. El mensaje ha sido claro: lo que se toleraba antes, ahora ya no tiene cabida.
El nuevo Vinícius: entre el orgullo y la adaptación
A Vinícius no le ha sentado bien el cambio, al menos en un primer momento. Acostumbrado a una relación más paternal con Ancelotti, el brasileño ha tenido que digerir una realidad en la que ya no cuenta con privilegios. Su entorno reconoce que el jugador “ha sentido el golpe”, aunque también admiten que entiende que el club está entrando en una nueva etapa, con un técnico que apuesta más por la meritocracia que por el nombre o el estatus.
Desde esta nueva perspectiva, Vinícius ha cambiado su actitud en los entrenamientos. Llega antes, participa con más intensidad y ha reducido sus gestos de descontento. Sabe que con Xabi Alonso no hay margen para la relajación y que su rol de estrella no le asegura minutos si no responde dentro y fuera del campo.