Vinícius, para quedarse, pide 20 millones, una prima de renovación y ser el número 1 por delante de Mbappé

Xabi Alonso está en una encrucijada. Por un lado, quiere que Vinícius se sienta valorado y motivado. Por otro, necesita equilibrar jerarquías: Mbappé y Bellingham también aparecen como pilares del proyecto que quiere construir. El técnico ha reconocido los esfuerzos del brasileño y mantiene una buena sintonía con él, pero está dispuesto a instaurar un modelo donde el talento deberá coexistir con la disciplina y la coherencia, sin privilegios excesivos.

Mientras tanto, el entorno del jugador, y en especial su agente, Frederico Peña, defiende que, si Vinícius no accede a ese estatus, podría contemplar ofrecimientos desde Arabia Saudí o Inglaterra por encima de los 100 millones. Eso complicaría al club: perdería a una figura emblemática o exigiría aceptar sus condiciones completas.

Vinícius pide 20 millones de euros, prima de renovación y superar a Mbappé

La renovación de Vinícius Júnior está desatando los primeros grandes movimientos en el Real Madrid de Xabi Alonso. El brasileño, en plena negociación, ha elevado el tono: exige un salario neto de 20 millones de euros anuales, una suculenta prima de renovación y convertirse en la estrella indiscutible del primer equipo, por delante incluso de Mbappé. Un pulso encendido que ya ha obligado a la cúpula a tomar posiciones.

Pese al valor probado, dos Champions, premios como The Best, y golazos decisivos en los últimos grandes éxitos blancos, Vinícius alega que su rendimiento y proyección justifican ser el jugador mejor pagado de la plantilla, superando al francés, que percibe 15 millones de euros netos anuales más bonos por su llegada libre, y a Bellingham. Quiere, además, que esa condición económica se acompañe del papel: ser el foco del club. Y ante esa petición, el presidente Florentino Pérez ha reaccionado. Valdebebas ya tiene memorizado el dosier: o se le reconoce con ese estatus, o se podría plantear su salida para evitar un efecto dominó en la escala salarial del vestuario.

Alta exigencia y futuro en el aire

El contexto financiero y deportivo complica la jugada. El Real Madrid ya ha aceptado estirar el techo salarial hasta 20 millones de euros para Vinícius, pero la prima de renovación millonaria y el estatus prioritario generan alarma en el club y en la afición. En Valdebebas hay convencidos de su impacto mediático y deportivo, pero también exigen que su trabajo en el campo esté a la altura de la ficha. Durante el Mundial de Clubes, se observó un rendimiento irregular: un partido notable frente al Salzburgo, pero ausente frente al PSG, generando dudas sobre su consistencia.

Vinícius ha encendido las alarmas del Bernabéu. Sus exigencias salariales, la prima de fidelidad y el deseo de liderar el vestuario marcan una línea roja en la negociación. Florentino ya ha advertido: negociar pero no al precio de romper el equilibrio interno. En este escenario, el futuro del brasileño parece depender de su capacidad para demostrar en el campo que merece ser, de verdad, la estrella número 1.