Xabi Alonso le pone la cruz a pesar de ser de lo mejor que tiene el Real Madrid

Aun siendo uno de los más talentosos del equipo, el joven futbolista del Real Madrid se queda fuera de los planes de Xabi Alonso

Xabi Alonso le pone la cruz a pesar de ser de lo mejor que tiene el Real Madrid

Desde que Xabi Alonso asumió el mando del Real Madrid, ha dejado claro que ningún nombre está por encima del rendimiento colectivo. En ese contexto, el joven Mastantuono —una promesa del club blanco— se ve ahora en una situación complicada: pese a su talento, las exigencias del técnico le han llevado a quedarse fuera del once por decisiones tácticas y disciplinarias.

Alonso ha valorado muy positivamente la evolución de Arda Güler, quien aporta frescura, desborde y lectura de partido en el ataque madridista. Su irrupción ha obligado a replantear las prioridades ofensivas y, en consecuencia, ha dejado a Mastantuono con menos protagonismo. Asimismo, la reaparición de Jude Bellingham tras superar su lesión también ha generado que las rotaciones en el mediocampo y zonas ofensivas se ajusten, dejando menos margen para error a quienes aspiran a consolidarse.

La decisión del entrenador y los motivos detrás

El club entiende que, aunque Mastantuono tiene un futuro brillante, ahora mismo no está ofreciendo la consistencia que exige un técnico como Alonso. Su despliegue es excelente, pero los altibajos, la adaptación al ritmo del primer equipo y la toma de decisiones en momentos clave le pasan factura. En Valdebebas ya se comenta que “la cruz” que le ha puesto Alonso no es un castigo emocional, sino una exigencia pura: adaptarse para jugar o asumir un rol secundario.

Franco Mastantuono

El mensaje es claro: “o subes, o quedas atrás”. Y en la casa blanca, ser una promesa no garantiza blindaje. El futuro de Mastantuono depende de su reacción inmediata ante los desafíos. Xabi Alonso ya le ha puesto la cruz. Ahora el joven talento debe decidir si la hace desaparecer o la lleva puesta.

¿Qué debe hacer para revertir la situación?

Mastantuono tiene claro que su momento ha llegado: debe responder en los entrenamientos, mejorar defensivamente, cuidar la concentración durante los 90 minutos y aceptar que el nivel competitivo en el Real Madrid es brutal. Xabi Alonso ha dejado caer que el talento no basta sin entrega, regularidad y eficacia en cada partido.

Arda Güler

El escenario podría ser el siguiente: seguir trabajando con el primer equipo, esperar oportunidades —quizá en copas o rotaciones— y demostrar que puede marcar la diferencia frente a equipos exigentes. Si no lo consigue, podría verse relegado a un rol más intermitente, con cesión incluida.