José Mourinho hunde a Barça y Madrid y traiciona a Cristiano Ronaldo

En media Europa están atentos al futuro de la Juventus de Turín de Andrea Pirlo y Cristiano Ronaldo, principalmente porque los altibajos han hecho acto de presencia y cuando no lo hacen, como en el estado actual –tras la victoria en el Camp Nou y ayer ante el Genoa, que acerca a la Juve al liderato del AC Milan- el tema recurrente en su seno sigue latente: la continuidad de Paulo Dybala. No está cómodo el argentino y lo ha dicho en el entorno de la Vecchia Signora, elevando su alegato tan alto que ya tiene respuesta desde la Premier League, por parte de José Mourinho.

Para el técnico del Tottenham conseguir en la campaña 21/22 a La Joya sería una de las más gratas noticias que podría recibir la franquicia londinense, ya que supondría disponer de uno de los mejores 10 del mundo como enganche para una de las mejores delanteras del planeta. Y es que el malestar de Dybala hace imaginar a The Special One un futuro próximo en el que poder juntar bajo sus órdenes a Son, Harry Kane y al argentino: una realidad demasiado jugosa como para dejarla escapar.

Sobre ello, lo cierto es que para Cristiano Ronaldo, estrella juventina, perder a su mejor socio sobre el césped, ahora que las cosas empiezan a marchar en lo deportivo, sería un palo enorme. Pero a decir verdad, Dybala está a tiro y parece que va seguir estándolo desde este mismo mes de enero para los grandes clubes del continente, donde parece que ya pujan con fuerza los spurs. Y lo está porque el jugador parece decidido a dejar la Serie A en busca de un nuevo reto.

En este sentido, el técnico luso insta a su club a un esfuerzo prematuro para evitar la posible recuperación económica de Barça y Real Madrid, que ya han pretendido al jugador sudamericano y que en verano podrían ser dos durísimos competidores por conseguirlo. Sabe Mou que ni culés ni blancos harán movimiento alguno ahora, en invierno, simplemente porque no se lo puede permitir económicamente. Sin embargo esa realidad va a cambiar en época estival. Por eso es ahora o nunca cuando Dybala debe ser suyo. Pero claro, una cosa es que el futbolista quiera salir y que incluso el club italiano acepte una oferta galáctica el próximo verano, y otra muy distinta es dejarle ir en medio de la temporada. Mourinho sabe que está muy complicado, pero no imposible, y por tanto, hay que intentarlo.