Camiones de mudanza en Zarzuela confirman la vuelta a casa después de años entrando a escondidas
La infanta Cristina regresa a Zarzuela, marcando un nuevo capítulo en su relación con la familia real.
Tras varios años de ausencia y siguiendo la norma de discreción, la infanta Cristina ha regresado a la Zarzuela, el hogar oficial de la familia real, con el objetivo de dedicar más tiempo a su familia. La existencia de camiones de traslado en el palacio ha corroborado lo que anteriormente era un rumor: la hermana del rey Felipe VI está de vuelta para permanecer una temporada.
Este regreso a la Zarzuela representa una transformación importante en su existencia, ya que durante años, su vínculo con la familia real, y particularmente con su hermano, había estado caracterizado por conflictos y separación, particularmente después de su divorcio con Iñaki Urdangarin.
Un cambio de actitud del rey Felipe VI
El retorno de la infanta Cristina a Zarzuela es el producto de una serie de transformaciones personales y familiares que han sucedido en los meses recientes. Después de concluir su matrimonio con Iñaki Urdangarin, la infanta ha optado por permanecer más tiempo en España, lugar en el que sus hijos han establecido su domicilio y donde la relación con su familia ha empezado a mejorar. Un acontecimiento que ha generado un cambio significativo es la postura de su hermano, el rey Felipe VI.
En los años anteriores a su separación, la relación entre ambos no era buena, y fue el propio Felipe quien en múltiples ocasiones le impidió el acceso a Zarzuela, dejando a la infanta Cristina sin la oportunidad de disfrutar de momentos íntimos en su casa. No obstante, después de la separación de Urdangarin, la infanta Cristina ha hallado un mayor respaldo en su hermano, quien ha otorgado su permiso para que permanezca más tiempo en el hogar de la familia real, algo que parecía inimaginable hace apenas unos meses.
El regreso a casa tras años de separaciones
La infanta Cristina ha estado viajando frecuentemente entre Madrid y Ginebra las últimas semanas; sin embargo, su regreso definitivo a Zarzuela ha resultado ser algo muy anticipado. Los vehículos de traslado que han arribado al palacio corroboran que la infanta ha regresado a la residencia familiar. Tras años entrando a escondidas, eludiendo la mirada pública y dedicando solo los fines de semana próximos a las celebraciones familiares, la infanta Cristina ahora tiene la posibilidad de vivir en Zarzuela de manera más franca y serena.
En su estancia fuera de España, la infanta residía extensos periodos en Ginebra, lugar donde residía con su exmarido, y solo retornaba de manera ocasional a Madrid o Barcelona para participar en eventos o visitar a su familia. Actualmente, las circunstancias han evolucionado y su aparición en Zarzuela se ha vuelto más habitual, lo que evidencia un vínculo tanto con su hermano, el rey Felipe VI, como con el resto de la familia real.
Este cambio de perspectiva y la aparición de la infanta Cristina en Zarzuela evidencian claramente cómo la familia real ha logrado ajustarse a la era moderna. Ahora, la infanta tiene la posibilidad de disfrutar de un tiempo más íntimo con su familia y su nación, sin las tensiones de antes, y sin la necesidad de esconder su presencia o aguardar que su hermano la permita ingresar.