Compañeros de Leonor en Elcano explican a sus familias que no da un palo al agua

Los privilegios de Leonor han comenzado a generar reticencias entre sus compañeros

Compañeros de Leonor en Elcano explican a sus familias que no da un palo al agua

Leonor nunca ha estado especialmente contenta con el hecho de tener que recibir la misma formación militar que recibió su padre antes de ser Rey de España. En este sentido, a pesar de que hubiera preferido una buena formación académica, la Princesa de Asturias ha asumido que lo que le toca es formar parte del ejército y desarrollarse en todos los aspectos de la vida militar. En este sentido, para rematar su paso por la marina, Leonor se embarcó en una larga travesía a bordo de Elcano, donde no está pasando los mejores meses de su vida.

La realidad es que desde que la embarcación zarpó y abandonó el puerto de Cádiz, no han sido pocos los percances que ha ido sufriendo la Princesa Leonor, que comenzó tratando de ser una más dentro de la tripulación, pero que ha acabado destacando por ser la persona con más privilegios dentro de los guardiamarinas. Y es que, está muy lejos de recibir el mismo trato que el resto de sus compañeros.

En este sentido, tal y como ha señalado Joaquín Abad, los compañeros de Leonor ya han comenzado a comunicar a sus familias que la Princesa de Asturias no da ni un palo al agua. De hecho parece que está en un crucero por el Atlántico en lugar de un buque escuela de la Armada. Y es que no realiza ni una prueba física y está liberada de las labores más duras.

Leonor

Leonor está usando todo su poder

A pesar de que desde Zarzuela se han esforzado para desmentir y negar cualquier rumor sobre el hecho que Leonor no trabaja como sus compañeros, la realidad es que por ser la Princesa de Asturias no hace ni una guardia nocturna y tampoco realiza la gran mayoría de pruebas físicas. En especial aquellas que se hagan antes de las 12 de la mañana y tampoco hace las más exigentes.

Así pues, los privilegios de Leonor a bordo de Elcano han comenzado a generar ciertas reticencias internas dentro de la embarcación, donde el resto de los guardiamarinas ven con recelo a una Leonor que no está dando ni un palo al agua y que está más cerca de estar en un crucero que en una travesía militar.