Froilán está causando problemas de gravedad a la escolta de Casa Real
Froilán continúa sin trabajo en Abu Dabi y da demasiados problemas a Juan Carlos I

Froilán ha sido una fuente constante de preocupaciones para su madre, la infanta Elena, y también para la Corona. A lo largo de los años, Felipe VI y la reina Letizia han tenido que llamarle la atención en más de una ocasión debido a su comportamiento. Desde niño mostró signos de que su adolescencia y juventud no serían fáciles de gestionar. Uno de los primeros incidentes que dejaron entrever su carácter conflictivo ocurrió en la boda de los actuales reyes, cuando propinó una patada a uno de sus primos.
Con el paso del tiempo, su actitud rebelde se hizo aún más evidente. Su etapa escolar estuvo marcada por dificultades académicas, repitiendo curso en varias ocasiones. A pesar de que su familia intentó enderezar su camino enviándolo a estudiar en el extranjero y sometiéndolo a una disciplina más estricta, estos esfuerzos fueron en vano. No logró completar sus estudios y tampoco parece tener un interés real en el mundo laboral. Lo que verdaderamente le motiva es la vida nocturna y la diversión.
Sin embargo, su afición por las fiestas terminó llevándole al centro de diversas controversias que colmaron la paciencia de la familia real. Uno de los episodios más escandalosos tuvo lugar durante la madrugada del día de Navidad, cuando se vio implicado en una pelea con arma blanca en la puerta de una discoteca en el exclusivo barrio de Salamanca, en Madrid. Un mes después, fue desalojado de un after clandestino en el que llevaba cuatro días de fiesta sin descanso. La policía detectó que el local superaba el aforo permitido y operaba bajo una licencia de sauna, además de encontrar sustancias ilícitas en una de las habitaciones donde se encontraba Froilán junto a sus amigos.
Ante esta situación, los reyes decidieron que era necesario tomar medidas drásticas. Felipe VI y Letizia instaron a la infanta Elena a actuar de inmediato; de lo contrario, serían ellos quienes intervinieran con consecuencias más severas. Fue entonces cuando el rey emérito Juan Carlos ofreció encargarse de su nieto favorito, ya que es prácticamente la única persona a la que Froilán respeta y obedece. Aunque en un principio el joven no estaba entusiasmado con la idea de mudarse, no tuvo otra opción.
Froilán acude a todas las fiestas que se organizan en casas privadas en Abu Dabi
Desde hace casi dos años, Froilán reside en Abu Dabi. Aunque no está previsto que regrese de manera definitiva, pasa temporadas en España, especialmente cuando su abuelo viaja a Galicia. Durante su estancia en los Emiratos Árabes, tuvo un empleo en una prestigiosa empresa petrolera, gracias a la mediación de Juan Carlos. Su posición era de becario, pero percibía un sueldo de 7.500 euros mensuales, una cantidad inalcanzable para la mayoría de los jóvenes en España. Además, contaba con un lujoso apartamento de 500 metros cuadrados sin coste alguno. Sin embargo, su contrato no fue renovado y actualmente no consta que trabaje en dicha empresa ni en ninguna otra.
A día de hoy, Froilán ni estudia ni tiene un empleo, aunque al menos se mantiene alejado del escrutinio mediático gracias a la protección del rey emérito. No obstante, su adaptación a Abu Dabi no ha sido sencilla. A diferencia de Madrid, donde tenía un nutrido grupo de amigos, en su nuevo destino se siente más solo. Pese a contar con recursos económicos más que suficientes para llevar una vida cómoda, la falta de ocupaciones ha hecho que no siempre utilice su tiempo de la mejor manera.
Preocupado por esta situación, Juan Carlos está buscando una nueva actividad para su nieto, consciente de que la inactividad puede llevarle nuevamente a situaciones comprometidas. Ya ha protagonizado algunos incidentes en Abu Dabi, lo que ha generado tensiones en el entorno del rey emérito. La familia real sigue de cerca la evolución de Froilán, con la esperanza de que encuentre un rumbo más estable y responsable.