Froilán ha explicado a sus primos que el abuelo empieza a no recordar a algunos amigos
Los problemas de Juan Carlos I han trascendido lo físico

Hasta ahora, el principal problema de salud de Juan Carlos I estaba relacionado con lo físico. El emérito era incapaz de caminar y por culpa de la falta de movilidad y los dolores en su pierna izquierda acabó postrado en una silla de ruedas. Sin embargo, tal y como se ha encargado de revelar el mismo Zarzalejos, lo que verdaderamente preocupa sobre la salud del emérito, son sus problemas a nivel cognitivo. Pues, ya no es que no pueda andar, sino que tiene grandes dificultades para reconocer a ciertas personas y no acaba de entender bien la realidad.
De hecho, según hemos podido saber, Froilán, que ve de forma casi diaria a su abuelo, ha percibido como Don Juan Carlos ha ido perdiendo facultades de forma demasiado acelerada. Le cuesta recordar los nombres de aquellas personas con las que ha forjado una amistad y su memoria, a medio plazo, es muy mala. Una realidad muy dura y que ya habría comunicado al resto de sus primos.
Juan Carlos I no entiende lo que hizo en el pasado
Según ha señalado el propio Zarzalejos, las dificultades cognitivas de Don Juan Carlos han llegado a un punto en el que lo han llevado a vivir en su propia burbuja. Una realidad completamente diferente de la del resto de personas, en la que cree que está siendo maltratado por su hijo y que en su pasado no hizo nada tan reprobable como para que lo expulsen del país. No es capaz de ser autocrítico ni de evaluar lo que hizo en su momento.
Todo esto ha hecho que en Zarzuela ya comiencen a entender que al emérito no le queda mucho tiempo de vida. Pues, si comienza a perder la cabeza y a dejar de razonar bien, su calidad de vida tampoco va a ser lo suficientemente buena. Motivo por el que Elena y Cristina todavía piden a Felipe VI que acepte traer a su padre de regreso a España.
Froilán está muy preocupado por su abuelo
Una de las personas más cercanas y que más cariño tiene por Juan Carlos I, es Froilán de Marichalar, que no soporta ver como su querido abuelo se va apagando poco a poco. Y es que el hijo de la infanta Elena ha vivido el empeoramiento de su abuelo en primera persona.