Jesús Ortiz, padre de Letizia, vive con seguridad privada en la zona más rica de Madrid

Jesús Ortiz, lleva tiempo en un plano muy secundario, absolutamente alejado de la vida de su hija y del resto de su familia. El padre de la Reina Letizia nunca estuvo especialmente conforme con el hecho de que su hija se casara con un hombre como Felipe VI. Sin embargo, esa decisión por parte de la que fuera presentadora de televisión, le sirvió para dar un giro absoluto a su vida. Y es que, en pocos años, Jesús Ortiz ha pasado de vivir en el seno de una familia humilde, a estar rodeado de riquezas, con una vida mucho más que acomodada.

Los orígenes de los Ortiz Rocasolano no fueron los propios de los miembros de la Casa Real. De hecho, Jesús Ortiz nunca destacó por ser un gran cabeza de familia. Más bien todo lo contrario. Cuando se divorció de Paloma Rocasolano dejó a su suerte a su familia y se alejó por completo de los suyos, a los que nunca pudo dar una vida mínimamente parecida a la que tienen ahora.

De hecho, a la familia de Letizia la solían llamar los ‘acelgas’ por ser un plato tan económico como nutritivo, propio de las familias más humildes. Y es que, si hay algo por lo que siempre han criticado a Jesús Ortiz, es por su mala costumbre de gastar en él, todo el dinero que llegaba a la casa. Lo que provocaba que nunca hubiera ahorros.

Jesús Ortiz dejó atrás sus comienzos humildes

Con el tiempo y la llegada de Letizia al trono de la Casa Real, Jesús Ortiz ha sido capaz de dejar atrás todas aquellas deudas que lo ahogaba a él y a su familia, para comenzar una nueva vida de rico en Pozuelo de Alarcón. El padre de la Reina Letizia vive en una urbanización de lujo junto a su esposa, Ana Tagores, en una casa cuyo valor no está por debajo del millón y medio de euros. Una clara demostración de que los orígenes humildes de los Ortiz Rocasolano han quedado en el olvido.

Así pues, después de ser conocido como el cabeza de familia de los ‘acelgas’. Jesús Ortiz ha dado un cambio radical a su vida. Pues, ha pasado de tener una vida sin ningún tipo de lujo y más que humilde, a mudarse a una de las urbanizaciones más caras y lujosas de todo Madrid.