Letizia ha estado en Gales por un problema grave de la infanta Sofía
La Reina Letizia ha apoyado a su hija por un mal de amores

Si hay algo que siempre ha estado en lo más alto de la lista de prioridades dela Reina Letizia, eso ha sido la educación y el cuidado de sus hijas. La consorte nunca ha dejado de lado a Leonor y a Sofía a pesar de los mil y un compromisos que ha tenido por su posición como Reina de España. En este sentido, a pesar de que Letizia siempre ha dado una educación de hierro a sus dos hijas, la realidad es que se ha esforzado y preocupado mucho por el bienestar y desarrollo de ambas.
La nueva vida de las hijas de los Reyes de España las ha llevado a residir lejos de Zarzuela y sin la protección constante de su madre. Esto implica que, más allá de tener plena libertad, Leonor y Sofía también se han visto obligadas a enfrentarse por su cuenta a los problemas propios de su edad. Algo que no ha sido tan sencillo como la infanta Sofía podía esperar. Es por este motivo que ha necesitado que su madre acuda en su ayuda.
Tal y como han revelado fuentes cercanas a Zarzuela, la infanta Sofía no está pasando por su mejor momento en Gales. La hija menor de los Reyes de España está sufriendo de mal de amores por culpa de la reciente ruptura con el joven que venía siendo su novio. Un desengaño amoroso que habría dejado muy tocada emocionalmente a la infanta Sofía.
Letizia viajó de urgencia hasta Gales
Ante la gravedad de la situación que atraviesa Sofía, la Reina Letizia tomó la decisión de volar de urgencia a Gales, para acompañar a su hija. La consorte recibió la voz de alarma por parte de los escoltas de la infanta y no dudó en pasar el fin de semana junto a ella. Pues, mientras que Felipe VI se encontraba en la nieve esquiando, ella estuvo al lado de la infanta Sofía, apoyándola a la hora de afrontar uno de los momentos más complicados de los últimos tiempos.
Así pues, ante el bajón emocional y de rendimiento académico de la infanta Sofía, Letizia tomó la decisión de viajar de emergencia hasta Gales para acompañar a su hija en un momento especialmente delicado provocado por la ruptura con el joven del que estaba profundamente enamorada.