Letizia siente repulsión por un problema de higiene de Felipe VI

Si hay algo por lo que destaca la Reina Letizia es por su obsesión con el perfeccionismo y porque todo sea estéticamente agradable a la vista. Tan es así que, antes de abandonar Zarzuela, la Princesa Leonor y la infanta Sofía vivieron un auténtico infierno en casa, donde había un sinfín de alimentos terminantemente prohibidos y donde todo lo que hacían estaba supervisado con lupa. Sin embargo, ese perfeccionismo obsesivo de Letizia contrasta con una forma de ser mucho menos curada de Felipe VI, que siempre ha destacado por ser una persona a la que su aspecto físico no le resulta especialmente importante.

En este sentido, hace tiempo que se puede apreciar como Felipe y Letizia son polos opuestos en lo que a la apariencia se refiere. Pues, mientras que la Reina dedica gran parte de su vida a mantener cada punto de su cuerpo perfectamente cuidado e inmaculado, a Felipe ya no es raro verlo con tiritas o pequeñas heridas en sus dedos, hecho que viene provocado por su manía de morderse constantemente las uñas. Un problema que sería impensable en Letizia que detesta lo descuidado que es su marido en ese aspecto.

Letizia, harta de la falta de higiene de su marido

La realidad es que a simple vista parece imposible que una mujer tan pulcra y perfeccionista como lo es Letizia, pueda llegar a soportar convivir con alguien que le da tan poca importancia a su higiene personal. En este sentido, a pesar de que Felipe VI nunca ha sido visto como una persona sucia, sí que ha mostrado, en ciertos momentos, como tiene muchos aspectos a mejorar, en cuanto a la higiene más personal. Especialmente en cuanto a su salud dental.

De hecho, más allá del problema de las uñas, Felipe VI tampoco tiene una sonrisa especialmente bien cuidada. De hecho, Letizia le ha prohibido sonreír en público, pues sus dientes no tienen una forma adecuada y le causa mucho estrés a la Reina, que, además se siente repugnada por el problema de aliento que sufre su marido. Así lo confirmó Jaime Peñafiel, quien también reveló que Leonor heredó la halitosis de su padre.

Así pues, si hay algo que molesta profundamente a la Reina Letizia, es la falta de higiene bucal de Felipe VI, que no solo tiene apiñados sus dientes delanteros, sino que también presenta un serio problema de halitosis, que hace complicado hablar de cerca con el monarca español.