Miguel Urdangarin gasta 5.000 euros en horas en una fiesta sin control fuera de España

Sin trabajo y bajo el amparo de Juan Carlos I, Miguel vive una vida descontrolada en Londres

Miguel Urdangarin gasta 5.000 euros en horas en una fiesta sin control fuera de España

Miguel Urdangarin, hijo de la infanta Cristina, ha desatado controversia tras gastar 5.000 euros en una noche de fiesta en un exclusivo club de Londres, donde las botellas superan los 1.000 euros. Desde que se mudó a la capital británica tras su salida de Zarzuela, el joven ha adoptado un estilo de vida ostentoso, financiado por las generosas contribuciones de su abuelo, el rey emérito Juan Carlos I. Sin empleo, Urdangarin disfruta de una cómoda vida que incluye noches de fiesta junto a su actual novia, Olympia, y un grupo de amigos comunes.

Ya se ha sabido que los Urdangarin viven bajo las alas del abuelo, quien asume sus gastos más allá de lo común y consiente los caprichos y lujos de sus nietos. Como se dijo anteriormente, Miguel recibe un “sueldo” de Juan Carlos de 10.000 euros mensuales. Ahora, según los rumores en una sola noche Miguel gastó 5.000 euros en una discoteca en tendencia, se dice que junto a su novia Olympia y algunos amigos.

Los Urdangarin están fuera de control

Los hábitos de la generación más joven de la familia real, son puestos en tela de juicio constantemente. Los hermanos Urdangarin, por una cosa u otra han sido polémica innumerables veces. Las fiestas son el pan de cada día de Irene y Miguel y de cuando en cuando las consecuencias de sus desenfrenos los hacen protagonistas de todos los titulares. A su vez, Pablo es quien más bajo perfil se mantiene, sin embargo, su poco éxito en el mundo deportivo ha sido cuestionado, y su padre ha sido noticia por señalar que los reyes estarían detrás de los fracasos de su hijo impidiéndole surgir en el medio.

Miguel por su parte, estudió Biología Marina y tras hacer las prácticas en una empresa no fue contratado. Según parece, no cumplió con las expectativas y contrataron a alguien más. Posteriormente, intentó formarse como profesor de esquí, pero se lesionó y tuvo que desistir de este nuevo proyecto. Ahora vive bajo el amparo del abuelo una vida de fiestas y excesos que están dando mucho de qué hablar y que empaña la reputación de la familia real.

Miguel Urdangarin junto a su madre

Cristina, entre la espada y la pared

No es novedad que la infanta Cristina no quiere conflictos con los reyes. Quienes, según se presume, la han presionado para que tome medidas con sus hijos que no dejan de estar en el ojo del huracán. Es por esto que, la infanta ha tenido que intervenir y se encuentra actualmente en Londres para pasar las fiestas con sus hijos e intentar poner las cosas en orden. Irene no va bien en la universidad y tiene muchos problemas en su nueva vida. Juan sigue enfrentando las consecuencias de los traumas ocasionados por lo vivido tras el caso Nóos. Y Miguel, aunque se mantiene más bajo perfil, también empujaría a su madre a estar alerta, quien se presume, estaría preocupada por la falta de norte en la vida de su hijo.

Preocupación justificada puesto que, gastar 5.000 euros en una sola noche, evidencia la vida descontrolada que Miguel estaría llevando y que sumado a la aparente carencia de nuevas metas a raíz de la frustración que le generarían sus últimos fracasos, apuntan a que es probable que hasta su salud mental esté comprometida en la actualidad, producto quizás del bucle de situaciones complicadas que han vivido como familia a raíz de la encarcelación de su padre.