Nuevo Porsche Cayenne eléctrico 2026: SUV de lujo con más de 1.000 CV
Las versiones más capaces destacarán por potencia y acabados
En Porsche siguen pensando que el futuro es eléctrico y, por eso, no cesan con sus pruebas sobre el terreno para testar la que va a ser su nueva joya: el Porsche Cayenne EV. Los tests se están realizando estos días en Alemania, cuando falta poco para que se celebre el Salón del Automóvil de Múnich, pero la marca no ha anunciado aún que vaya a presentar allí el coche.
La generación que ahora se prepara será la cuarta, pero Porsche sigue callada: aunque todo indica que el coche podría estar listo para dejarse ver en la feria de la capital bávara, no hay confirmación de este hecho. De momento, lo que se ha visto recuerda al Taycan, aunque con algún detalle diferenciado como los faros más planos o la ausencia de las tomas de aire habituales en anteriores generaciones y que servían para refrigerar el coche. Ahora, todo eso se sustituye por un sistema de aerodinámica activa en el faldón.

¿Cómo es?
La configuración es la de siempre: un SUV grande de cinco metros con enormes llantas de 20 pulgadas con tapacubos aerodinámicos y hasta ‘flaps’ integrados en las branquias verticales de los extremos. Esos ‘flaps’, hay que recordarlo, sólo estarán disponibles en las versiones más equipadas.

Potencia
El coche, de tracción total, incluye dos motores –uno por eje- que opueden llegar a superar los 1000 CV de potencia en las versiones más equipadas. El vehículo pasará de 0 a 100 km/h en menos de tres segundos y subirá hasta 200 en menos de diez, pero la velocidad se limitará a 250 kilómetros por hora. ¿Por qué? Pues para no agotar la batería, que va a ofrecer una autonomía que superará los 700 km. De precios, los alemanes no han dicho nada aún. El mutismo es la norma en una marca, Porsche que sabe que todos sus coches tiene muchas novias antes de llegar a sus concesionarios. Es lo que tiene el verdadero lujo: que se vende solo y sin demasiados esfuerzos. El precio, por supuesto, superará tranquilamente los 100.000 euros y se acercará a los 150.000 en las versiones más equipadas. Es lo normal, porque el Cayenne nunca ha sido un coche para mayorías.