Renault reinventa el clásico Renault 4 con una versión furgoneta pensada para empresas urbanas
Te lo llevas a casa por 30.000 euros
Los clásicos vuelven y, del mismo modo que lo hicieron históricos como el Volkswagen Escarabajo, el Mini o el Chrysler PT Cruiser, ahora lo han hecho el Fiat Panda, el Renault 5 y está a punto de hacerlo quizá el 2 CV. Mientras eso se concreta (o no), en Renault han decidido aprovechar el filón y, tras lanzar este verano la versión eléctrica y renovada del Renault 4, presentan ahora la versión furgoneta del histórico utilitario francés.

Versión comercial
El Renault 4 Van, que así se llama, retoma para fines comerciales el diseño icónico del Renault 4 y prescinde de las plazas traseras. En tanto que biplaza, ofrece un volumen de carga de hasta 1405 litros con suelo plano y umbral bajo de maletero. En la caja, caben objetos de hasta 1,20 m de largo y 0,9 m de ancho.
Sólo hay una versión, Renault no se ha querido complicar. De serie, el coche monta llantas de acero de 18 pulgadas, sistemas de iluminación LED, sensor de lluvia, freno de estacionamiento eléctrico, reposabrazos central delantero, asiento de conductor ajustable, control de crucero, sensores traseros de aparcamiento, alerta de distancia de seguridad y otras muchas ayudas a la conducción.

Precios, motores y autonomía
Renault presenta la versión comercial del Renault 4 eléctrico con dos motorizaciones: un 120 CV asociado a una batería de 40 kWh que cuesta 30.834 euros sin descuentos ni ayudas y un 150 CV vinculado a una batería de 52 kWh que cuesta 33.834 euros. Las baterías son en los dos casos de iones de litio y la autonomía, en el primer caso, es de 311 km y, en el segundo, de 413, El coche acelera de 0 a 100 en 8,2 segundos y, por supuesto, luce en su parabrisas el distintivo 0 de la DGT. Renault, en su día, hizo célebre aquel R4 por su fiabilidad y versatilidad, comparables a las de un todocamino de los actuales. ¿Conseguirá ahora con la versión eléctrica y revisitada del coche algo parecido? los ingenieros de Renault ya han hecho su trabajo y, ahora, llega el momento de los comerciales. Veremos.