Marc Casadó se convierte en un problema en el vestuario del Barça

El centrocampista ha perdido protagonismo con Flick de manera inesperada

Marc Casadó se convierte en un problema en el vestuario del Barça

Marc Casadó fue una de las grandes sorpresas del FC Barcelona al inicio de temporada. El canterano tuvo una gran irrupción con la llegada de Hansi Flick al banquillo y se convirtió en un jugador muy importante. El técnico alemán le pidió que se quedara, ya que él tenía en mente irse cedido a otro equipo para tener más minutos, y le dio las llaves del centro del campo en el pivote defensivo.

Ahí, el catalán ha demostrado el nivel que tiene y ha sorprendido a todos con su intensidad y su técnica en el terreno de juego. Sin embargo, todo ese protagonismo que tenía en los primeros meses del curso se ha acabado, y de manera inesperada, Flick lo ha enviado al banquillo de forma indefinida, tanto en los últimos partidos como en los siguientes. Por eso, se ha convertido en un problema en el vestuario.

Casadó no está teniendo minutos y quiere jugar más

Casadó no está teniendo ahora los minutos importantes que sí disfrutaba al principio de la campaña y quiere jugar más. No ha entendido del todo este cambio del alemán, ya que lo ha convertido en un suplente de la noche a la mañana y su puesto en el once lo ha ocupado Frenkie de Jong. El neerlandés empezó la temporada lesionado, pero una vez se ha recuperado y se ha puesto a tope físicamente, le ha quitado el sitio a su compañero.

Marc Casadó - EFE

Algunos de los compañeros más cercanos al canterano, como Pedri o Gavi, tampoco entendieron esta decisión de Flick, ya que el canterano estaba teniendo un buen rendimiento y seguía creciendo con el paso de los partidos, teniendo en cuenta que solo tiene 21 años. Aun así, el entrenador alemán ha decidido apostar por un jugador más veterano en el centro del campo azulgrana.

El canterano no se plantea su futuro de momento

De momento, Casadó sigue pensando en triunfar en el Barça y quedarse muchos años más en el club de su vida. El catalán quiere ganar muchos títulos con el conjunto culé y no se le pasa por la cabeza abandonar la entidad, aunque ahora haya quedado en un segundo plano. Cree que podrá recuperar la confianza de Flick en un momento u otro y volverá a ser importante en el equipo.