Pedri no calla más y le canta las cuarenta a Joan Laporta por una jugada sucia del Barça
El centrocampista y algunos compañeros más se enfadaron con la cúpula por las intenciones que tenían
El FC Barcelona intentó conseguir el fichaje de Marcus Rashford, del Manchester United, en el pasado mercado de invierno. El conjunto azulgrana quería reforzar la delantera y el inglés fue el elegido para darle un salto de nivel a la zona atacante, pero finalmente la operación no fructificó por el hecho de que el Barça no tenía espacio salarial para acomodar su alta ficha y necesitaba salidas, pero no se produjeron.
Aun así, en el vestuario habían muchas dudas acerca de la incorporación del futbolista británico e incluso no acabó de sentar bien que se intentara ficharlo por la situación actual que vive el club catalán. Según apunta Catalunya Ràdio, el entorno de varios jugadores importantes, con Pedri a la cabeza, así como Gavi o Ronald Araujo, mostraron su preocupación por las intenciones que tenía la cúpula culé.
Pedri se quejó del intento de fichaje de Rashford
El canario no entendía que se intentara fichar a alguien como Rashford, con un salario muy alto, después de haber reducido los problemas financieros de la entidad y haber llegado a la regla 1:1 del fair play financiero, antes que regularizar la situación de las piezas más cruciales del equipo de Hansi Flick, es decir, acometer las renovaciones de algunos futbolistas transcendentales para los planes del técnico alemán.

Por eso, y después de que el vestuario transmitiera esta inquietud a la dirección deportiva, el conjunto azulgrana cambió el plan y puso por delante la continuidad de la columna vertebral de la plantilla. Después de esto, renovaron el mismo Pedri y los jugadores mencionados anteriormente, como Gavi y Araujo, así como Gerard Martín. El toque de atención surtió efecto y se normalizaron los contratos.
El extremo inglés no tenía sitio
Aun así, y aunque el Barça renovó a piezas importantes, intentó el fichaje de Rashford hasta el final, pero no hubo manera. Tendrían que haber salido futbolistas como Ansu Fati o Andreas Christensen, ya que su marcha habría abierto espacio salarial para la incorporación del inglés, pero finalmente el delantero no quiso salir y el danés se lesionó a pocos días de que finalizara el mercado.