Barça, Chelsea… y Carlo Ancelotti ya calienta el fichaje de los 102 kilos: ahora o nunca
El jugador tiene ante sí la posibilidad de cambiar el rumbo y vivir un final de 2023 y principio de la 23/24 con una perspectiva diferente
Luis Figo, Zinedine Zidane, Kaká, James Rodríguez, Aurélian Tchouameni, Cristiano Ronaldo, Gareth Bale y por encima de todos está Eden Hazard, que costó cerca de 102 libras esterlinas (unos 115 M). Ni mucho menos todos estos nombres alcanzaron lo que se suponía que sus precios y talento iban a dar en conversión al Real Madrid, pero desde luego de estas grandes estrellas, unas más infladas que otras, la gran decepción ha sido precisamente la más cara de todas, la última, esa que pone a calentar Carlo Ancelotti para este tramo final de LaLiga.
El Madrid aprieta en el tramo final pero LaLiga está perdida
Cuando ha llegado el momento de la verdad -más allá de que LaLiga ya estaba muy comprometida antes de la visita liguera del Madrid al Camp Nou, donde perdió 2-1- Carlo Ancelotti y su equipo han dado la cara, ganando con solvencia en el campo del Barcelona, al que además han eliminado de la Copa del Rey, y triunfando en la ida de cuartos de final ante el Chelsea. Hazard, que por el precio de su compra y por el nivel de futbolista que fue en la Premier, debería de estará a estas alturas tirando del carro, pero no ha participado ni en ninguno de estos dos duelos ni en ninguno de los grandes momentos del Madrid en los últimos años. Es, por rendimiento, una decepción.
Situación compleja
El problema con Hazard, que manifiesta el club a Carletto, es que tiene contrato hasta 2024 y muy complicado ser vendido en verano debido precisamente a su sueldo, de modo que el Madrid de alguna forma necesita minutos del belga para mostrarlo e intentar un milagro con él, ya sea para ayudar en lo deportivo o conseguir que suene la flauta en las ventanas de transferencias. Pues bien, con la liga perdida y sin nula transcendencia entre lo que da la segunda plaza liguera con respeto a la tercera, Carletto puede empezar a darle minutos en la competición doméstica, lo cual, para el aficionado, casi es un alivio. Cádiz espera.