Koeman se lo comunica: “Lo siento Leo, el nuevo líder es él”

Koeman se lo comunica: “Lo siento Leo, el nuevo líder es él”

Messi se lleva el palo de su vida tras el Clásico

Ayer en el Camp Nou se vivió la constatación de un hecho que algunos no querían que ocurriese nunca y otros llevaban años deseándolo: Leo Messi ya no es el amo y señor del Fútbol Club Barcelona. Si bien es cierto que el argentino, siempre que coge el balón da sensación de peligro, está muy lejos de ser ese futbolista mágico que en cada acción generaba goles, asistencias o peligro real y no solo sensaciones. Ahora Leo pierde balones como el resto de los mortales, no llega a balones divididos y es superado por los defensas y mediocentros rivales con cierta frecuencia.

Leo Messi

Esto no pasó ayer inadvertido para nadie, y menos aún para un Ronald Koeman que no perdía detalle de lo que ocurría sobre el tapete. Pero además de la constatación de que ese Leo Messi que dejaba con la boca abierta a todos en cada partido ya no está, se pudo ver en las filas del Barcelona al jugador que está llamado a recoger su cetro: un Ansu Fati con mucha personalidad que apareció en todos y cada uno de los minutos que estuvo en el campo (80 minutos). Fue veloz, incisivo, con descaro, combinativo, generoso con sus compañeros e incluso marcó gol dejando claro que Ramos es un genio en anticipación pero que en carrera sus mejores tiempos también pasaron ya.

Cuando el duelo terminó, ya en los vestuarios, Koeman quiso ser sincero con Messi, como lo es siempre el holandés, y le comunicó que, a partir de ahora, el líder sería Ansu Fati y que Messi tendría que poner todo su talento al servicio del jovencísimo jugador. Ansu es el futuro y Koeman quiere que Leo le enseñe todo lo que un líder debe saber. Será, para Koeman, la misión más importante de Messi y le cree totalmente capacitado para llevarla a cabo.

Para el de Rosario ha sido muy duro asumir algo así y darse cuenta de que sus mejores tiempos ya han pasado pero el hasta ahora mejor jugador de fútbol de la historia (para muchos) también sabe que aunque no sea al nivel de antes, todavía le queda fútbol en sus piernas para dar muchas asistencias y marcar otros tantos goles. Y ahora, además de eso, tutorizar al príncipe heredero de Ansu Fati.