Lewandowski no lo quiere a su lado porque es como jugar con diez
El delantero polaco apunta, directamente, a un compañero
La temporada de Casadó en el FC Barcelona ha estado marcada por una inesperada regresión en su protagonismo. Tras brillar como canterano y tomar protagonismo gracias a las bajas de titulares, su rol ha quedado claramente tocado. Su capacidad de presión y lectura del juego eran alabadas, pero se ha enfrentado a una fuerte competencia (Frenkie de Jong, Pedri, Gavi, Marc Bernal) que le ha relegado a segunda fila.
Como consecuencia, su adaptación al estilo exigido por Hansi Flick —mayor ritmo, presión intensa, recuperación rápida— parece no estar siendo suficiente para convertirlo en opción permanente. El hecho de que el club esté dispuesto a escuchar ofertas de unos 30 millones de euros por él es indicativo del problema: su cotización es buena, pero su encaje deportivo se cuestiona.
¿Por qué no encaja con Robert Lewandowski y el planteamiento azulgrana?
Desde el frente atacante, Lewandowski sigue siendo el gran referente del Barça, pero su estilo exige una conexión con el medio que asegure juego fluido, continuidad en ataque y posesión estructurada. El problema surge cuando el pivote elegido ralentiza el centro del campo o limita la circulación rápida de balón. Casadó, aunque cumplidor en labores defensivas, no aporta la velocidad de transición ni la capacidad de conectar de forma natural con el nueve que necesita sentirse abastecido.

Por su parte, Lewandowski, en varias ocasiones, ha sido descrito como alguien que necesita una estructura ofensiva que le provea movilidad, lanzamientos en velocidad y apoyo constante. En este sentido, si Casadó opta más por equilibrio defensivo o por replegarse tras pérdida, se rompe la dinámica ofensiva que el delantero requiere.
Rumores de salida de Casadó
Respecto al futuro de Marc Casadó, sí hay movimientos de escenario: el Barça no pretende forzar su salida, pero está abierto a escuchar ofertas si el jugador lo considera. Se habla de un valor en torno a los 30 millones de euros como punto de partida. Mientras tanto, Casadó ha manifestado su deseo de quedarse y pelear por un puesto.

En conclusión, el choque entre el perfil de Casadó —más conservador, menos dinámico ofensivamente— y las necesidades de juego de Lewandowski (requieren fluidez, ritmo y abastecimiento constante) parece ser una de las razones por las que el equipo no termina de funcionar como debería. Y mientras Casadó continúa en el Barça, su rol y aporte seguirán siendo cuestión clave para el éxito del conjunto.