El Chelsea alucina: Dembélé exige lo imposible y el Barcelona llora

El Chelsea alucina: Dembélé exige lo imposible y el Barcelona llora

El delantero ha puesto una serie de condiciones para terminar firmando por el conjunto inglés

La situación de Ousmane Dembélé sigue siendo de lo más llamativa. El delantero finalizó su vinculación contractual con el Fútbol Club Barcelona hace ya algunas semanas y todavía, pasada la primera mitad del mes de junio, sigue siendo un agente libre en el mercado. Es extraño que un futbolista de su talento y con su categoría todavía no haya encontrado acomodo en ningún lugar, pero es cierto que muchas de las cosas que suceden en torno al francés no tienen explicación lógica. 

Dembele

Son varios los equipos que, como no podía ser de otra manera, se han interesado en los últimos tiempos por él. Su rocambolesca situación en Barcelona, con una relación prácticamente rota con el club y posteriormente una reconciliación en busca de la renovación, han hecho que todavía el delantero no se haya decidido y esté aún valorando la opción de quedarse, pero es que desde fuera están apretando mucho para hacerse con sus servicios. 

Uno de los mejores posicionados para terminar llevándose al galo es, según informa The Sun en Inglaterra, el Chelsea. En favor de esa posible operación juega que el técnico blue es Thomas Tuchel y que ambos, entrenador y jugador, ya coincidieron hace años en las filas del Borussia Dortmund, precisamente cuando Dembélé despuntó y llamó la atención del mundo entero. Aquella fue, seguramente, la mejor etapa deportiva del delantero hasta el momento y puede ser un gran aliciente a tener en cuenta para que finalmente Ousmane termine dejando el Camp Nou.

Sin embargo, el propio Dembélé, según sigue contando The Sun, ha puesto exigencias encima de la mesa y no está dispuesto a marcharse a Londres de cualquier manera. El francés ha exigido un puesto de titular en Stamford Bridge para encontrar la regularidad que no ha tenido nunca desde que llegó al Barcelona. Está cansado de formar parte de rotaciones y de no partir siempre en el once inicial, así que la exigencia a Tuchel es clara, necesita la confianza para poder recuperar su mejor versión, esa que en su día le llegó a hacer pagar al Barça la escalofriante cifra de 140 millones de euros.