Guillermo de Gales retiró todo el alcohol y tabaco de la residencia de Carlos III y Camilla Parker Bowles
Los médicos piden que Camilla y Carlos III cambien sus malas costumbres
El estado de salud de los Reyes de Inglaterra no destaca por ser el mejor. Mientras que Carlos III sufre un cáncer de colon que le ha hecho la vida imposible a lo largo del último año, Camilla sigue batallando contra las consecuencias de una infección de pecho que la ha dejado fuera de combate en reiteradas ocasiones. En este sentido, el equipo médico de Buckingham ya habría encontrado el principal motivo de los males de Carlos III y de la Reina Camilla. Se trata de las malas costumbres que arrastraron, durante años, los Reyes de Inglaterra.
Tal y como han revelado fuentes cercanas a la Casa Real de Gran Bretaña, mientras que Carlos III acabó con el consumo de alcohol desde que le detectaron el cáncer hace ya más de un año, la Reina Camilla nunca decidió apostar por su salud y siguió con la costumbre de beber y fumar diariamente. Una decisión que, según los médicos, ha acabado lastrando su recuperación y enquistando sus problemas pulmonares.
Esta situación ha acabado provocando que Camilla Parker Bowles haya quedado fuera de la primera plana de la Casa Real de Gran Bretaña de forma demasiado habitual, dejando mucho más trabajo para Carlos III. Algo que, según han contado en Reino Unido, no ha hecho ninguna gracia al Príncipe Guillermo que lo que no quiere es que su padre se siga desgastando al acudir a todos los actos oficiales de la Realeza.
Guillermo de Gales tomó medidas drásticas contra Camilla
La decisión de la Reina Camilla a la hora de no dejar ni de beber ni de fumar acabó llevando al Príncipe Guillermo, a intervenir de forma directa. Y es que, tal y como hemos podido saber, por orden directa del hijo mayor de Carlos III, se retiró todo el alcohol y tabaco de la residencia de los Reyes de Inglaterra. Una decisión tomada con la intención de que Camilla cese por completo de unas malas costumbres que, de forma indirecta, han acabado pasando una seria factura a Carlos III.
Así pues, con la intención de preservar la salud de Carlos III y de la Reina Camilla, Guillermo de Gales ha tomado la decisión de retirar cualquier gota de alcohol y de tabaco de la residencia de los Reyes de Inglaterra.