Juan Carlos I explica a sus dos hijas que los resultados de su último reconocimiento médico no son buenos

El emérito sabe que difícilmente podrá volver a caminar

Juan Carlos I explica a sus dos hijas que los resultados de su último reconocimiento médico no son buenos

Juan Carlos I no está disfrutando de la etapa más feliz de su vida en Abu Dabi. El emérito hace tiempo que se siente solo y abandonado en Emiratos Árabes, donde, a pesar de tener la atención constante de un equipo de cuidadores y de sus hijas, Elena y Cristina, no se siente como en casa. Y es que, especialmente en estos últimos meses, Juan Carlos I ha comenzado a extrañar mucho su vida en España, donde estaba rodeado de sus seres queridos y donde no necesitaba ayuda constante para poder llevar a cabo su día a día con normalidad.

De hecho, ha sido en Abu Dabi, donde tiene una mansión con playa privada y miles de metros cuadrados a su disposición, que Juan Carlos ha comenzado a ir a peor. Y es que, por culpa de los problemas físicos originados en su maltrecha cadera, el emérito ha acabado postrado en una silla de ruedas y teniendo que recibir, diariamente, pinchazos en las piernas para inhibir un dolo que definen de inaguantable.

Esta situación de Juan Carlos I hace que tenga que someterse a reconocimientos médicos de forma constante y continua, para saber, en todo momento, si hay algo que no esté en orden o que requiera intervención médica. Unos exámenes que, recientemente ha acabado de confirmar lo que el emérito ya se temía.

Juan Carlos I

Juan Carlos I ha avisado a sus hijas de los resultados

Con la infanta Cristina y la infanta Elena a su plena disposición, Juan Carlos I se ha reunido con ellas para explicarles que su evolución está muy lejos de ser favorable. La cadera sigue sin funcionar y su pierna izquierda también ha comenzado a sufrir las consecuencias. Y es que, en estos momentos, las opciones de que el emérito pueda volver a caminar son muy bajas, por no decir que nulas. Pues, salvo que el tratamiento con células madre que se está realizando en Ginebra tenga unos resultados perfectos, lo que le resta de vida a Juan Carlos I va a ser sentado en una silla de ruedas, lo que ha dejado al emérito, derrumbado por completo.

Así pues, Juan Carlos I ya ha comunicado a sus hijas, Elena y Cristina que, sus últimos resultados médicos no son nada alentadores. Más bien todo lo contrario, pues todo apunta a que la situación de su cadera y su pierna izquierda ha llegado a un punto de no retorno.