La infanta Cristina introdujo una cláusula en el divorcio que penaliza la boda de Iñaki Urdangarin

Iñaki Urdangarin no puede casarse con Ainhoa Armentia sin consecuencias

La infanta Cristina introdujo una cláusula en el divorcio que penaliza la boda de Iñaki Urdangarin

El divorcio de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina marcó un momento crítico en la vida de Zarzuela. Y es que, después de más de cinco años en la cárcel y tras conocer a Ainhoa Armentia que ahora ya es, de forma oficial, la nueva pareja de Iñaki, los Duques de Palma oficializaron una ruptura que, más de un año después, todavía está muy lejos de quedar totalmente cicatrizada por todas las partes implicadas. Y es que, por culpa de los celos, los incumplimientos de ciertos acuerdos y de varias cuentas pendientes, Iñaki y Cristina todavía siguen enfrentados.

En este sentido, mientras que cada uno sigue tratando de rehacer su vida, Iñaki Urdangarin con Ainhoa Armentia y Cristina con un importante empresario catalán, sigue habiendo grandes temas pendientes de resolución. Pues, a pesar de que ya no tienen nada que los una, Iñaki sigue tratando de sacar hasta el último céntimo de los Borbón. Pues, tal y como le prometieron al ingresar a prisión, si se mantiene callado, va a tener la vida solucionada para siempre. Una promesa que parece que está costando que se cumpla.

Y es que, lejos de pagar una generosa pensión al exduque de Palma a cambio de no haber revelado ningún secreto de Zarzuela, tanto la infanta Cristina como Juan Carlos I llevan tiempo buscando la forma de dejar de pagar los más de 25.000 euros mensuales que pactaron en su momento.

Urdangarin

Urdangarin cobrará salvo que se case con Ainhoa

La realidad es que esa pensión vitalicia firmada en el momento de divorciarse tiene una cláusula que no da total libertad a Iñaki Urdangarin. Y es que si quiere mantener ese ingreso regular de 25.000 euros o incluso de 50.000 euros, el que fuera Duque de Palma sabe que no puede casarse con Ainhoa Armentia, ya que en el acuerdo de divorcio aceptó que no volvería a casarse con nadie más, después de separarse completamente de la infanta Cristina. Un punto que ahora no permite que Iñaki se pueda casar oficialmente con su actual pareja.

Sin embargo, si hay algo que Urdangarin sabe hacer, es negociar. Y es que, más allá de cualquier tipo de cláusula, el exmarido de Cristina cuenta con información muy comprometedora y, en caso de dejar de recibir la pensión mensual que acordó en su momento, podría acudir a un plató de televisión para desvelar algunos de los secretos mejor guardados de Zarzuela, algo que la Casa Real no se puede permitir.