Zidane prepara un 'bombazo' para Villarreal (que no va a gustar a más de uno)

Se acabó. Zinedine Zidane se mostró contundente pero tranquilo tanto en la Flash Interview como en la sala de prensa del estadio de Mestalla. La derrota ante el Valencia era algo que no se esperaba, pero menos aun que el Real Madrid saliera al campo de la forma en la que lo hizo. Ahora no queda más margen de maniobra, pues a pesar de que el equipo sigue teniendo un punto más que el Barça y un partido menos, ni siquiera hay fecha para la disputa del duelo ante el Celta y el día a día ya refleja una diferencia mínima que podría hacer que el Real perdiese el liderato este mismo domingo, algo que sería devastador desde el punto de vista mental.

Por ello, el técnico francés está pensando en el partido de Villarreal como una auténtica final. Es absolutamente capital vencer a los castellonenses para mantenerse en cabeza, borrar del calendario una de las salidas más exigentes que le quedan al equipo y, de paso, disipar cualquier atisbo de crisis. Y para conseguirlo, Zidane piensa volver a la versión más conservadora del equipo blanco: se acabaron las rotaciones y los experimentos. El equipo de gala saltará al césped del Estadio de la Cerámica para intentar cerrar el partido lo antes posible.

En ese once de gala estará, por supuesto, Gareth Bale. El expreso de Cardiff volvió a ser suplente ante el Valencia. Zizou consideró que seguía siendo mejor reservarle para un segundo tiempo con más espacios y tiró de James Rodríguez en una alineación inicial igualmente competitiva, pero después se vio obligado a tirar de él por necesidad, y sin éxito. Ya hemos contado en DB que para Zidane, el equipo es otro con Bale en el campo, ya que el galés provoca que los rivales se guarden más las espaldas atrás y jueguen más atrasados, sin conceder metros al espacio. 

Así pues, es de esperar un equipo de gala, con la única novedad de Pepe por Varane, cuya lesión se ha confirmado este viernes. Aunque todavía podría cambiar alguna cosa de aquí al domingo. Todo dependerá de cómo vea Zinedine a los suyos en las últimas sesiones de entrenamiento, pero en general, los experimentos serán pocos, o ninguno, algo que seguramente no guste a la segunda unidad, en la que hombres como Isco, Morata o Asensio cada vez protagonizan más rumores de cara al próximo verano. Que nadie espere rotaciones masivas. Mucha tensión acumulada para las últimas horas del próximo fin de semana.